Todos tenemos una forma personal de relacionarnos con el dinero, y a veces esa relación es tóxica. Mientras para unos es un amigo en quien confiar, para otros es una fuente de culpa, miedo, frustración y angustia.
Cuando piensas en tu situación financiera, ¿te sientes insegura? ¿Te gusta ver tu cuenta de banco o lo evitas a toda costa? ¿Te has sentido culpable por tu forma de administrar tu sueldo?
Si alguna vez te has preguntado qué tan sana es tu relación con el dinero, aquí te decimos algunas de las señales que indican que necesitas hacer cambios en tu cartera de inmediato.
Toma nota:
1- Gastas más de lo que ganas
Cual telenovela, este es un clásico que siempre tiene el mismo final: una gran deuda impagable. Sabes que tienes una relación tóxica con el dinero cuando tu estilo de vida es muy superior a lo que puedes pagar, nunca ahorras y todo lo pagas con tarjetas de crédito, a las cuales solo les abonas el mínimo mensual. Esto te genera deudas de las que es muy difícil salir. Vivir acorde o por debajo de lo que ganas te permite ahorrar para tu futuro y te da tranquilidad.
2- Siempre terminas en la misma situación financiera
Una de las primeras señales de que tu relación con el dinero es inestable es que te estancas en la misma situación. No importa lo que hagas para mejorar, al final te vuelves a llenar de deudas y tu sueldo jamás te alcanza. Esto no es un problema de dinero, sino de hábitos, porque entras en un círculo vicioso: sales de deudas, sientes que tienes más dinero y vuelves a gastar como antes, en vez de recortar gastos, medirte o ahorrar. Es decir, vuelves a hacer lo mismo que te llevó al problema inicial.
3- No tienes una estrategia monetaria sólida
Cada quincena vas improvisando qué hacer con tu dinero. A veces pagas deudas, a la otra te lo gastas todo y después ahorras un poco, pero no hay un plan detrás que te ayude a alcanzar tus objetivos.
4- Sientes que no tienes control sobre tus finanzas
En vez de hacerte responsable de tu situación económica y enfrentarla, solo te dejas llevar por ella. Hay quienes toman el papel de víctimas y culpan de sus desafíos a factores externos: la crisis económica, los bajos sueldos, la inflación, etc. Si bien es cierto que a nuestra generación le toca enfrentar muchas adversidades en este sentido, tampoco es motivo para dejar que la corriente nos arrastre sin luchar por nuestro bienestar. Siempre puedes crear un plan para mejorar tus finanzas y salir adelante.
5- Te da miedo el dinero
Otra emoción que provoca el dinero es el miedo: a nunca tener suficiente, a que ocurra una calamidad financiera, a tenerlo y que se acabe, o bien, a tener demasiado y volverte un blanco para los delincuentes. El miedo nos impide disfrutar lo que tenemos en este momento.
6- No usas tu dinero para disfrutar la vida
Todos tenemos una forma personal de relacionarnos con el dinero, y a veces esa relación es tóxica. Mientras para unos es un amigo en quien confiar, para otros es una fuente de culpa, miedo, frustración y angustia.
Cuando piensas en tu situación financiera, ¿te sientes insegura? ¿Te gusta ver tu cuenta de banco o lo evitas a toda costa? ¿Te has sentido culpable por tu forma de administrar tu sueldo?
Si alguna vez te has preguntado qué tan sana es tu relación con el dinero, aquí te decimos algunas de las señales que indican que necesitas hacer cambios en tu cartera de inmediato.
Toma nota:
1- Gastas más de lo que ganas
Cual telenovela, este es un clásico que siempre tiene el mismo final: una gran deuda impagable. Sabes que tienes una relación tóxica con el dinero cuando tu estilo de vida es muy superior a lo que puedes pagar, nunca ahorras y todo lo pagas con tarjetas de crédito, a las cuales solo les abonas el mínimo mensual. Esto te genera deudas de las que es muy difícil salir. Vivir acorde o por debajo de lo que ganas te permite ahorrar para tu futuro y te da tranquilidad.
2- Siempre terminas en la misma situación financiera
Una de las primeras señales de que tu relación con el dinero es inestable es que te estancas en la misma situación. No importa lo que hagas para mejorar, al final te vuelves a llenar de deudas y tu sueldo jamás te alcanza. Esto no es un problema de dinero, sino de hábitos, porque entras en un círculo vicioso: sales de deudas, sientes que tienes más dinero y vuelves a gastar como antes, en vez de recortar gastos, medirte o ahorrar. Es decir, vuelves a hacer lo mismo que te llevó al problema inicial.
3- No tienes una estrategia monetaria sólida
Cada quincena vas improvisando qué hacer con tu dinero. A veces pagas deudas, a la otra te lo gastas todo y después ahorras un poco, pero no hay un plan detrás que te ayude a alcanzar tus objetivos.
4- Sientes que no tienes control sobre tus finanzas
En vez de hacerte responsable de tu situación económica y enfrentarla, solo te dejas llevar por ella. Hay quienes toman el papel de víctimas y culpan de sus desafíos a factores externos: la crisis económica, los bajos sueldos, la inflación, etc. Si bien es cierto que a nuestra generación le toca enfrentar muchas adversidades en este sentido, tampoco es motivo para dejar que la corriente nos arrastre sin luchar por nuestro bienestar. Siempre puedes crear un plan para mejorar tus finanzas y salir adelante.
5- Te da miedo el dinero
Otra emoción que provoca el dinero es el miedo: a nunca tener suficiente, a que ocurra una calamidad financiera, a tenerlo y que se acabe, o bien, a tener demasiado y volverte un blanco para los delincuentes. El miedo nos impide disfrutar lo que tenemos en este momento.
6- No usas tu dinero para disfrutar la vida
7- Evitas ahorrar para tu retiro
No tienes visión a largo plazo de tus finanzas y siempre encuentras excusas para no ahorrar para la jubilación: ahora no tengo dinero, lo resolveré después, o la favorita de los veinteañeros: “soy muy joven para preocuparme por eso”. Por supuesto que todos queremos disfrutar nuestro dinero aquí y ahora, pero entre más temprano empieces a ahorrar, más intereses acumularás, y eso se traduce en una vejez más tranquila.
8- Crees que el dinero es bueno o malo, no hay más
Creer que el dinero es la raíz de todo mal o, al revés, que es la respuesta a todos tus problemas, también es una señal de una relación tóxica. Al final, el dinero no es bueno ni malo, solo es un instrumento que puede ayudarnos a realizar nuestro plan de vida.
Fuente:www.veititantos.com