La sinceridad fue la vía usada el Comisionado de Calles de Filadelfia: “Philly está en bancarrota”. Lo expresó de manera emotiva debido a que la Alcaldía no puede permitirse el pago por riesgo para los trabajadores de la sanidad.
Carlton Williams, Comisionado de Calles de Filadelfia, argumentó que como resultado de la pandemia del coronavirus los presupuestos se agotaron. Según las cuentas la ciudad se vio obligada a tapar un agujero presupuestario de 749 millones de dólares. El déficit en la recaudación de impuestos es el origen, dijo el comisionado al Consejo Municipal el miércoles.
“Simpatizamos con las llamadas para proporcionar un pago adicional a los trabajadores de primera línea. Ellos siguen poniendo sus vidas en juego durante la pandemia del COVID-19. Sin embargo, cualquier propuesta de pago por peligrosidad necesitaría ser apoyada con fondos externos. Es un asunto de transparencia administrativa, el presupuesto debe provenir de fuentes estatales y federales”. Esta fue una declaración de Williams durante una audiencia del Comité Laboral el miércoles.
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Sobre este tema ha escrito el periodista de WYHH, Aaron Moselle, quien recordó que el Consejo aprobó una resolución llamando a la audiencia en enero. Sin embargo Philly está en bancarrota y ese en un obstáculo insalvable por los momentos.
Philly está en bancarrota
Cherelle Parker fue la consejera que introdujo la medida en respuesta a un artículo de octubre de 2019 de PlanPhilly. Todavía espera convencer a la ciudad de que los trabajadores del sector de la sanidad merecen una indemnización por riesgos. Especialmente a la luz de los peligros adicionales que han tenido que asumir para seguir trabajando durante la pandemia. Sin embargo es un hecho de Philly está en bancarrota.
Con el advenimiento de la pandemia los trabajadores recolectores de basura han tenido un aumento en su labor. Ahora la gente trabaja desde casa y la cantidad de basura que llega a las aceras se disparó.
WYHH recordó que los trabajadores de la ciudad han hecho actividades para ayudarse a sí mismos. Los empleados de saneamiento también se han quejado de la falta de equipo de protección personal. No son dotados de máscaras, guantes y desinfectante para las manos.
El periodista Aaron Moselle trajo a la memoria la iniciativa del empleado, Terrill Haigler, alias @_yafavtrashman. El lanzó una campaña de recaudación de fondos para comprar equipo de seguridad para él y sus compañeros de trabajo. Haigler también ha usado su plataforma para pedir la paga por riesgo.
El contagio por COVID no es lo único
La consejera Cherelle Parker dijo que la “COVID” es sin duda un peligro para ellos ahora mismo. Tal vez es el mayor peligro en estos momentos. Pero una vez que la COVID se haya ido y tengamos una vacuna, aún quedarán otros peligros”.
Entre ellos: heces, agujas hipodérmicas usadas y gases de escape de biodiésel de los camiones.
Shyketa Armstead, una trabajadora sanitaria que recoge basura en toda la ciudad, dio su testimonio. Ha tenido que lidiar con heces humanas untadas en un cubo de basura de BigBelly en Center City. Rutinariamente se enfrenta a la posibilidad de ser pinchada con agujas en Kensington. Este riesgo ha existido más allá de que Philly está en bancarrota.
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“En Kensington, tienes que ir más despacio y examinar la basura porque son agujas que sobresalen. Así que si tiras la bolsa de basura en la tolva, esa aguja podría ir a uno de tus compañeros o a alguien más en la calle”, dijo.
Experiencias como esa son las que le hacen pensar que ella y sus compañeros de trabajo en el sector de la sanidad tienen derecho a la paga por riesgo.