Agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) y policías federales detuvieron el lunes a 367 migrantes que caminaban rumbo al municipio de Pijijiapan en la costa del estado de Chiapas, México.
La Policía Federal y Migración desplegaron un operativo especial para desarticular una caravana de aproximadamente dos mil personas migrantes que viajaban desde Mapastepec hacia Pijijiapan, pero a pocos kilómetros de llegar a esta última localidad, fueron detenidos en un punto conocido como Echegaray.
Los migrantes, en su mayoría centroamericanos, partieron a las 3:00 de la mañana y caminaron durante varias horas por la carretera 200 antes ser detenidos a medio día por policías y agentes de migración.
Antes de llegar a Pijijiapan donde el INM tiene una caseta de inspección, decenas de agentes migratorios y federales esperaban con 10 autobuses y camionetas para subir a los migrantes y presuntamente trasladarlos a la estación migratoria Siglo XXI, en Tapachula, para ser deportados.
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Autoridades señalaron que algunos de los migrantes lanzaron piedras a los funcionarios que integraban el operativo, otros huyeron por entre los matorrales, pero muchos otros fueron arrestados.
Algunas personas que integraban la caravana reclamaron a los policías por el arresto argumentado que no habían cometido ningún delito y lo único que querían era llegar a la frontera norte del país, para cruzar a los Estados Unidos.
El grupo de aproximadamente dos mil migrantes se constituyó en Mapastepec, localidad en la zona sur del estado de Chiapas, con contingentes que fueron llegado en diferentes fechas, el más numeroso arribó hace dos días.
Desde hace tres semanas los migrantes permanecían allí en espera de una respuesta de las autoridades migratorias para obtener la visa humanitaria mexicana que les permitiría transitar por el país de manera legal.
El pasado 12 de abril un grupo de migrantes entró a territorio mexicano de forma violenta y decidió avanzar por su cuenta sin registrarse ante las autoridades de México, a ellos se sumó el grupo que estaba esperando en Tapachula desde hacía semanas.
Migrantes procedentes de El Salvador narraron que permanecieron en el albergue de Mapastepec, mientras que los agentes de migración estudiaban su caso. Luego de un mes les ofrecieron la tarjeta de trabajador regional pero ellos lo que quieren es continuar hasta el norte de México y cruzar a Estados Unidos donde, según aseguraron, los esperan familiares que les ayudarán a conseguir trabajo.
El contingente seguía la ruta que desde octubre del año pasado recorrieron diferentes caravanas de migrantes que llegaron a la capital y al norte de México.
Esta es la primera vez que se conoce que las autoridades migratorias intervienen en las caravanas migrantes que desde el año pasado han surgido en la frontera sur mexicana.
López Obrador: “Es un problema serio originado en Centroamérica”
Ante la situación ocurrida el lunes con los migrantes, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, dijo que “habrá que ver qué pasó”.
“Nosotros lo que queremos es que se cuide a los migrantes. Primero que se les den opciones de trabajo, estamos otorgando posibilidades para que trabajen en el sur del país, porque es un problema serio originado fundamentalmente en Centroamérica, de falta de oportunidades y también por la violencia”, explicó el mandatario mexicano.
Agregó que en segundo lugar a los migrantes hay que “cuidarlos y para eso se les pide un registro, para saber de dónde son, tener sus datos generales en el caso de familias. También no permitir el enganche o el tráfico que se lleva a cabo con migrantes, es decir, personas que cobran por trasladar a migrantes, para (evitar) eso se requiere ese registro”.
El Presidente dijo que su gobierno no quiere el libre paso de migrantes por territorio mexicano por las condiciones de violencia que se viven en el norte del país donde se han presentado casos de secuestros y asesinatos masivos de migrantes.
Explicó que el libre tránsito de migrantes no se trata solo de un asusto legal sino que es una cuestión de seguridad. “En el norte (de México) hemos tenido problemas; asesinatos de migrantes en otros tiempos y no queremos eso. La violencia mayor la tenemos en estados del norte y preferimos atender a la población migrante de Centroamérica en el sur y sureste”, dijo.
“Hemos actuado con mucho respeto a los migrantes y lo vamos a seguir haciendo, con respeto a sus derechos humanos, hasta ayer después de muchos días y mucho tiempo ocurrió este incidente y por eso hoy vamos a informar”.
Insistió en que no habrá confrontaciones con el gobierno de Estados Unidos y que se buscará una solución “sin pleitos” con el presidente Trump.