Las consecuencias de la malnutrición ha derivado en un problema fatal. Según fuentes internacionales y locales el hambre en Afganistán ha comenzado a matar niños. El país sumido en un conflicto bélico por cerca de dos décadas está frágil. La infancia es un blanco fijo en medio de los eventos violentos. De allí que los pequeños pierdan peso hasta fallecer.
Una alerta sobre esta situación fue emitida. Había datos suficientes para pronosticar que millones de niños pueden sufrir malnutrición antes de finales de año. La muerte es una consecuencia evitable del menoscabo en la dieta. Sin embargo una nación en guerra y en plena transición de poder coloca su fuerza en un solo punto.
Puedes leer: El Papa pide un mundo más inclusivo en la Jornada Mundial del Migrante
Los casos fatales se han registrado en el centro del país. Según la AFP la provincia la muerte por inanición llegó a Ghor. El dato fue confirmado por el mulá Mohamad Amadi, director de los hospitales en esa región.
Hambre en Afganistán
Los últimos datos de morbilidad exponen que unos 300 niños recibieron tratamiento médico a causa de la malnutrición. Según Mohamad Amadi, centenares de niños están subalimentados en el centro del país. El hambre en Afganistán está en muchas casas y los medios para evitar que los niños perezcan son endebles.
Un portavoz de Unicef, Salam al Janabi, dijo que no podía confirmar el número de niños muertos en Ghor. Sin embargo indicó que “muchos de ellos están pagando este precio final”. Este integrante de la agencia de ONU explicó que están haciendo informes sobre el peligro de hambruna en Afganistán. “Tememos que estamos al borde del abismo”, reconoció.
Crisis humanitaria
El intempestivo retiro de las tropas estadunidenses ha sido un catalizador del hambre en Afganistán. El corrupto y endeble gobierno que ayudaron a formar se desplomó tras la salida de los primero soldados. Tras el regreso al poder de los talibanes a mediados de agosto, se acentuó la crisis humanitaria en Afganistán.
Puedes leer: Cambio climático puede provocar 216 millones de desplazados
Se debe a las sequías, al precio desorbitado de los alimentos y a la pérdida de puestos de trabajo. Estas variables no pueden ser compensadas por la ayuda internacional. La ONU ya lo había advertido. Dijo que que a finales de año un millón de niños, de menos de 5 años, podrían sufrir una “malnutrición muy severa”. Ellos van a necesitar tratamiento médico para seguir con vida. Unos 3.3 millones, según la ONU, podrían padecer una “malnutrición grave” en Afganistán.