Las enfermeras de Philly han iniciado una huelga en demanda de mejores condiciones laborales. La reivindicación no está centrada en la segunda ola del coronavirus, pero su arribo las pone en una peor situación en la que ya están.
Esta situación es el reflejo de muchos hospitales a lo largo de la nación. Mantienen la contratación de personal al mínimo para maximizar beneficios. No obstante el aumento de contagios por COVID-19 en cantidad parecer peor que en primavera. Los hospitales se están quedando sin camas debido al incremento de las hospitalizaciones
Las enfermeras de Philly quienes han salido a dar la cara, en su mayoría trabajan para el hospital Trinity Health. Sin embargo la protesta incluye a las afiliadas a la Asociación de Enfermeras Especializadas y Profesionales Aliados de Pensilvania. Los datos los hemos tomado de un trabajo de Nina Feldman de WYHH.
Puedes leer: Pensilvania exigirá pruebas de COVID-19 a todo el que entre al estado
Las enfermeras quieren tener suficiente personal en cada unidad para poder concentrarse en el cuidado de los pacientes. Citan como ejemplo que en la unidad de medicina/cirugía de Bozeman, hay una enfermera por cada 11 pacientes. Su equipo determinó que el personal allí debería duplicarse.
Enfermeras de Philly deben ser más
La necesidad de personal seguro es especialmente grave. Los casos de COVID-19 aumentan y los hospitales se preparan para una afluencia de pacientes. Más allá de la segunda ola las enfermeras de Philly deben ser más. Y esa tasa debe crecer en los centros hospitalarios del todo el país.
Rebecca Givans, una experta en estudios laborales de la Universidad de Rutgers que se especializa en entornos de atención médica ofreció su opinión.
“Es evidente que ahora existen estrategias mucho mejores para tratar a los pacientes con COVID que las que había al principio de la pandemia. Se trata de estrategias que requieren mucho personal”.
Colocó como ejemplo la “pronación”. Es la práctica de voltear a los pacientes frecuentemente entubados sobre sus estómagos para aliviar la presión en sus pulmones. La maniobra ha demostrado salvar vidas. Sin embargorequiere hasta media docena de enfermeras y asistentes para su desempeño.
“La escasez de personal significa que cada paciente de COVID no puede tener ese nivel de atención y las personas pueden morir a causa de ello”, dijo Givans.
Hospitalizaciones aumentan
El caso de las enfermeras de Philly denota un drama más allá. Actualmente, más estadounidenses están hospitalizados con COVID-19 que nunca.
Mientras más de 73 mil personas en todo el país buscan atención médica para el virus, los profesionales de la salud dicen que han llegado al límite. Se están quedando sin camas y equipos para tratar la abrumadora afluencia de pacientes.
El doctor Scott Michener, director médico del Hospital Conmemorativo del condado de Comanche en Lawton, Oklahoma, dijo que han comenzado a reutilizar equipos que ni siquiera están dentro del hospital. Estos datos fueron hallados en un reporte de 6abc.
“La semana pasada ocurrió que tuvimos que sacar un ventilador de una ambulancia y tener a alguien en un ventilador de transporte”, dijo Michener.
Michener dice que su hospital tiene uno más allá de su capacidad total y que ninguno de los otros hospitales cercanos puede ayudar tampoco.
Otras enfermeras hacen crisis
Lacie Gooch, enfermera de Nebraska, dijo que su hospital está lleno de pacientes con el virus. La crisis no solo la enfrentan las enfermeras de Philly.
“Tenemos 10 unidades COVID y una de esas es solo un lugar para que la gente se vaya y fallezca, desafortunadamente”, dijo Gooch.
Puedes leer: “Asombroso y trágico” número de niños con coronavirus en EEUU
Ashely Bartholomew, enfermera en El Paso, Texas, dijo que su punto de ruptura se produjo cuando uno de sus pacientes comparó el COVID-19 con la gripe. Finalmente, el paciente fue ingresado en la unidad de cuidados intensivos.
“Te sientes derrotado”, dijo. “Aquí está este paciente que está en la UCI y todavía está claramente confundido sobre cuán real es el COVID”.