El gobernador de Texas, Greg Abbott, dictó una medida ejecutiva que faculta a las autoridades estatales a regresar a los puertos de entrada fronterizos con México a los migrantes ilegales que detengan.
La medida genera un enfrentamiento con el gobierno federal, encargado de manejar la política migratoria de Estados Unidos. Abbott facultó a la Guardia Nacional y al Departamento de Seguridad Pública (DPS), ambas entidades estatales, a través de una orden ejecutiva.
La medida implica la inmediata deportación de las personas detenidas a la frontera con México, una acción sin precedentes tomada por la administración texana. Abbott afirmó que el fin de semana pasado fueron detenidas 5.000 personas que cruzaron de forma ilegal a Estados Unidos, por lo que generaron “una crisis en la frontera que atropella a las comunidades de la línea”.
En un twit el gobernador Abbott comentó que poco después de firmar la nueva orden ejecutiva, el Departamento de Seguridad Pública de Texas y la Guardia Nacional de Texas devolvieron a más de 250 inmigrantes ilegales a la frontera.
“El Estado de la Estrella Solitaria está tomando medidas sin precedentes para proteger a los estadounidenses y asegurar nuestra frontera”, dijo.
Shortly after signing my new executive order, the Texas Dept. of Public Safety & Texas National Guard returned over 250 illegal immigrants to the border.
The Lone Star State is taking unprecedented action to protect Americans & secure our border.https://t.co/CYJtPhgUTA
— Greg Abbott (@GregAbbott_TX) July 12, 2022
La orden ejecutiva ha sido criticada por defensores de los derechos humanos que han advertido que todo forma parte de una campaña electoral. Dicen que el gobernador Abbott buscará la reelección en los comicios de noviembre.
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“La estratagema política del gobernador es moralmente censurable e incuestionablemente ilegal”, dijo Jeremy McKinney, presidente de la Asociación Estadounidense de Abogados de Inmigración (AILA).
McKinney añadió que la Constitución de los Estados Unidos deja en claro que la aplicación de la ley de inmigración es una facultad de la autoridad federal y que los gobernadores de los estados no pueden establecer sus propias políticas.
Todavía no existen cifras respecto al mes de junio, pero en mayo se batió el récord de ingresos ilegales. La Patrulla Fronteriza capturó a 177.000 personas, un 15% más que en abril.
“La Administración Biden debe responder rápidamente con litigios y recordarle al gobernador Abbott que la Constitución establece claramente cómo se supone que debe funcionar nuestra república democrática“, insistió el abogado.
Abbott ha culpado de la crisis actual al gobierno del presidente Joe Biden quien ha gastado más de 3.000 millones de dólares de fondos estatales en un mecanismo masivo de seguridad fronteriza. Sin embargo, la operación estatal no ha detenido el flujo de migrantes.
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“Mientras los desafíos en la frontera sigan incrementándose, Texas continuará tomando medidas para hacer frente a esos desafíos provocados por el gobierno de Biden”, declaró Abbott.
Hace algunos días en varios condados le solicitaron al gobernador Abbott “declarar la invasión” y utilizar poderes extraordinarios que sólo podrían ser usados en tiempos de guerra. De esa manera podrían enviar por la fuerza a los migrantes a México, sin tomar en cuenta las leyes de inmigración que son facultades del gobierno federal.