El diputado opositor venezolano Julio Borges en una carta pidió a los gobiernos latinoamericanos actuar de manera conjunta para terminar con el mandato de la presidencia de Nicolás Maduro, gestión que califica como “dictadura”.
Para el expresidente del Parlamento venezolano, Maduro se encuentra “irremisiblemente perdido” y opina que “todo concurre” favorablemente para abordar el “desalojo del poder” del mandatario pues, según sus palabras “el dictador enfrenta hoy día un panorama interno e internacional que precipitará su salida inexorablemente”.
Borges considera que el agravamiento de la crisis económica que aqueja al país petrolero, conforma un cuadro de difícil manejo para el gobierno. El abogado venezolano cita como ejemplos al desabastecimiento, la hiperinflación, la devaluación de la moneda y el masivo flujo de migrantes, que de no lograr un cambio político, podría alcanzar los 9 millones de personas este año.
A estos factores, Borges añade el desplome de la producción petrolera, principal fuente financiera del país, la “persecución” desatada contra las principales voces adversas al Gobierno y las graves irregularidades ocurridas durante los comicios de mayo, en los cuales el presidente actual obtuvo la reelección y que no fueron reconocidos por numerosos gobiernos.
Borges, considerado como prófugo por la Justicia venezolana, añade en la misiva, que debido a este difícil panorama “le queremos reiterar a los presidentes de toda América que Venezuela es un Estado fallido y un gran peligro para toda la región. En segundo lugar, que los venezolanos no podemos desalojar solo con nuestra fuerza una dictadura tutelada por Cuba y Rusia”.
El líder de la oposición, que está en el exilio, considera necesario articular de manera inmediata, acciones que generen mayor presión a Maduro.
Entre las acciones concretas solicitadas por Borges, se incluye la aplicación de nuevas sanciones personales contra dirigentes oficialistas y que sean investigados por corrupción, lavado de dinero, narcotráfico, contrabando, tráfico de armas y desestabilización democrática en los países.
También el papel de las Fuerzas Armadas venezolanas es visto por el líder opositor como un factor determinante en la búsqueda de una salida a la crisis. Su solicitud la emplaza a que venza la represión y el chantaje y sea un factor decisivo para restaurar la Constitución y la democracia.
Respecto a la decisión del gobierno mexicano de optar por una actitud diplomática y de respeto frente a la declaración del Grupo de Lima, el fundador del partido Primero Justicia, demanda una actitud que supere la indiferencia y la ingenuidad, y que trabajen conjuntamente con el resto de Latinoamérica para ensamblar una transición democrática” en el país caribeño.
Por: José Espinoza