Facebook y Twitter hacen ingentes esfuerzos para borrar su delgada reputación y anunciaron que eliminaron cuentas vinculadas a Irán, Rusia y Venezuela, “que tenían el objetivo de influir en decisiones políticas regionales e internacionales.
La crisis de credibilidad de las empresas de Zuckerberg se ha mantenido viva y bajo la lupa del Congreso, cuando su CEO asumió la responsabilidad por la filtración masiva de datos a la empresa Cambridge Analytica en el marco de las elecciones presidenciales celebradas en 2016 en Estados Unidos.
Desde entonces se ha tornado implacable en relación a la “hydra” que representan sus plataformas sociales, un aparato orgánico al que no controla por fuera y del que ha hecho –demostradamente- un mal uso desde el punto de vista ético de los negocios.
Facebook y Twitter eliminaron 783 páginas, grupos y cuentas que mostraban “un comportamiento falso y coordinado” desde Irán, de acuerdo al jefe de ciberseguridad de Facebook, Nathaniel Gleicher.
“Hemos eliminado estas páginas en función de su comportamiento, no del contenido que publicaban. Las personas detrás de esta actividad se coordinaron entre sí y usaron cuentas falsas”, apuntó Gleicher en un comunicado.
Según el experto, las cuentas desde Irán publicaron contenido con un “fuerte sesgo” a favor del gobierno de Teherán y contra Occidente y vecinos regionales, como Arabia Saudí e Israel.
Las páginas, algunas de las cuales habían estado activas desde 2010, habían obtenido alrededor de dos millones de seguidores en Facebook y más de 250 mil seguidores en Instagram, empresa también propiedad del grupo californiano.
El reporte periodístico además revela que estas cuentas invirtieron cerca de 30 mil dólares en publicidad en Facebook e Instagram y organizaron ocho eventos entre sus seguidores.
No hubo comentarios en torno al por qué recibían las inversiones en publicidad a sabiendas de las indeseables actividades que se desarrollaban en las cuentas ahora eliminadas.
La plataforma Twitter, por separado, reveló que había eliminado miles de cuentas falsas dirigidas desde Rusia, Irán y Venezuela que pretendían influir en la política estadounidense y en sus propios países.
La red social del pájaro azul identificó dos operaciones en Venezuela que involucraron a cerca de 2 mil cuentas de origen irregular, casi 500 usuarios falsos controlados desde Rusia y unas 300 manipuladas desde Irán.
En septiembre, Facebook y Twitter defendieron ante el Senado de EE.UU. que sus compañías han aumentado los esfuerzos para identificar y cerrar cuentas falsas y aumentar la transparencia en la publicidad.