La Comisión de Calles y Servicios del Ayuntamiento de Filadelfia celebró una audiencia sobre un proyecto de ley crearía un procedimiento de imposición contra autos ruidosos.
La legislación establece que ninguna persona puede “crear, causar o permitir la creación de sonido que emane de un vehículo de motor a un nivel de cinco decibelios por encima del nivel de fondo medido desde una distancia de 25 o más pies”.
Tal como lo reseña WHYY, la implicación del procedimiento legal consistiría básicamente que, si alguien a 25 pies de distancia puede oír cualquier ruido procedente de un auto, el conductor de éste último estaría infringiendo la ordenanza.
Con el propósito de determinar las infracciones el proyecto de ley también crearía un procedimiento de aplicación que utilizaría dispositivos de medición del sonido junto con cámaras para precisar a los conductores de autos ruidosos.
El asesor especial del Comisario de Policía, Francis Healy se refirió a la contaminación sónica producida por esta circunstancia como un problema que afecta la calidad de vida de los vecindarios.
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Healy añadió que al utilizar sonómetros combinados con cámaras, el proceso sería “coherente sin la participación directa de la policía”. Y añadió: “Este proyecto de ley logra el equilibrio adecuado entre la emisión de infracciones que afectan a la calidad de vida en nuestra ciudad, al tiempo que reduce las interacciones físicas con los automovilistas.”
Dispositivos para medir sonidos
El Concejal Mark Squilla, que presentó el proyecto de ley, dijo que los funcionarios de la ciudad y la Autoridad de Aparcamiento están buscando proveedores para proporcionar los dispositivos de medición de sonido con la ayuda de la Autoridad de Aparcamiento de Filadelfia, el grupo que gestiona el sistema de cámaras de control de semáforos en rojo y de velocidad en la ciudad. Teniendo en cuenta que el soporte tecnológico ya existe, sólo restaría adjudicar un contrato una vez que se apruebe el proyecto de ley.
Squilla quiso subrayar que el sistema no “perfilará a los individuos”, sino que “observará las infracciones y qué vehículos las están infringiendo, pudiendo revisarlas las autoridades, y luego emitir multas si esas revisiones están justificadas”.
La Ciudad y la Autoridad de Aparcamiento están trabajando en cómo aplicar la normativa si se aprueba en el pleno del Ayuntamiento.