El río de la historia no avanza en forma lineal. Lo hace en meandros, donde hay fuerzas que atrapan junto a otras que empujan. Este lunes se dio a conocer que la ONU busca reparos ante el legado de la esclavitud y el colonialismo. Su mirada está en el tema en el ámbito mundial. Curiosamente, sin embargo, esta petición llega cuando la derecha estadounidense busca olvidos.
Michelle Bachelet, la Alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU realizó este lunes una petición. Solicitó a las naciones la creación de “un mecanismo de expertos independiente”. Un grupo que podría centrarse más claramente en el problema del racismo sistemático en las fuerzas del orden y el sistema de justicia penal”.
Puedes leer: Padres en EEUU están en pánico ante la Teoría Racial Crítica
Su llamamiento se produce cuando se está debatiendo en EEUU la llamada “teoría crítica de la raza”. En estos momentos la derecha estadounidense desea que todos olviden. El hito que refrescó el rostro racista de la nación fue la sentencia por el homicidio de George Floyd. Desde entonces un sector político hacer esfuerzos por hacer de la Teoría Crítica Racial un monstruo. Desean desaparecer de las escuelas e instituciones, episodios oscuros de la historia de EEUU, como la esclavitud y la segregación.
ONU busca reparos en todo el mundo
La base de la propuesta está en el informe sobre la violencia policial contra los afrodescendientes. Un documento que fue publicado el 28 de junio de 2021. Bachelet pedido a los Estados que tomen “medidas inmediatas” contra el racismo sistémico al que están sometidos los negros.
“Detrás del racismo sistémico y la violencia racial de hoy en día hay varias cosas. Se encuentra la falta de reconocimiento formal de las responsabilidades de los Estados. Así con el de otros actores que participaron en la esclavitud, la trata transatlántica de esclavos africanos y el colonialismo. Esto incluye además a los que beneficiaron de ellos. Así como los que siguen sacando provecho de este legado”, declaró Bachelet.
La ONU busca reparos en una historia del pasado y en una situación que no termina. “Comunidades, familias y personas se vieron privadas de sus vidas, medios de subsistencia, recursos y derechos. Y esta situación continúa”, aseguró. “La represión de las protestas contra el racismo en algunos países debe verse en un contexto más amplio. Se suprimen las voces de los afrodescendientes y de quienes luchan contra el racismo”.
EEUU desde la CDH
La Comisionada de la ONU habló de acciones “ante las profundas y trascendentales injusticias”. “Es urgente abordar el legado de la esclavitud, la trata transatlántica de esclavos y el colonialismo. Asimismo las sucesivas políticas y sistemas de discriminación racial, y concretar una justicia reparadora”. La ONU busca reparos y la iniciativa de Bachelet fue escuchada por petición por los representantes africanos de la Asamblea.
Según una versión periodística de la AFP Bachelet indicó que la reparación es clave “para sanar nuestras sociedades”. Es una manera de “hacer justicia por crímenes terribles. Es fundamental establecer la verdad sobre estos legados y su impacto hoy en día. Al igual que tomar medidas para remediar estos daños a través de una amplia gama de medidas reparadoras”.
Ben Moeling representante estadounidense frente al CDH abordó el tema que toca profundamente a su país. “Con humildad e introspección, afirmamos que la desigualdad racial es un desafío al que se enfrentan todos los estados. Es un asunto que incluye a Estados Unidos, pero que juntos podemos superarlo”, declaró.
Apunte sobre la Teoría Crítica Racial
La Teoría Crítica Racial define una escuela de pensamiento. Surgió en las facultades de derecho estadounidenses a finales de los años 1970. Su fin es analizar el racismo como un sistema, con sus leyes y lógicas de poder. Se desprende de la óptica que lo observa como una serie de prejuicios individuales.
Puedes leer:Desempleo crónico en Philly estimula a la violencia armada
La ONU busca reparos y la derecha en los Estados Unidos deberá responder. Hasta el momento está liada en una campaña de desinformación. Su meta es crear una mala reputación a la Teoría Crítica de la Raza. Y más allá transformar su denominación en un nuevo concepto que defina para sus seguidores un peligro nacional.