Por allá en 2009 el Real Madrid tenía un partido crucial, pero su centro atacante, el argentino Gonzalo Higuaín estaba lesionado y quedaba la opción de usar al suplente Karim Benzema.
En la conferencia de prensa previa, los periodistas preguntaron al entrenador luso José Mourinho cómo pararía al equipo sin su ariete y respondió: “Si no tienes perro para ir a cazar y tienes un gato, vas con él”.
A Karim nunca le gustó el apodo, pero desde entonces su trayectoria por el fútbol mundial ha sido fulgurante y los medios lo bautizaron como “El Gato Benzema”.
Ahora que comenzó la carrera por el codiciado Balón de Oro cuyo galardón entregará el 29 de diciembre la revista France Football, el nombre del francés está en las papeletas. Son 30 los nominados y pocos los elegidos en un premio que ha estado dominado por Cristiano Ronaldo y Lionel Messi.
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Esta vez el futbolista del Real Madrid es uno de los favoritos, avalado por un estudio de la prestigiosa cadena de noticias BBC que lo sitúa como el delantero más infravalorado del mundo. Frente a las críticas Karin no se muerde la lengua. Hace algún tiempo declaró: “Yo juego para la gente que le gusta el fútbol, para la gente que sabe de fútbol”.
El Gato Benzema, a sus 33 años, podría recuperar el Balón de Oro para Francia, algo que no sucede desde que Zinedine Zidane lo ganó en 1998. Los gestos técnicos del killer madrilista son inigualables.