Este domingo en la noche la explanada del Aeropuerto Ejecutivo de Opa-locka en Miami-Dade el presidente Donald Trump protagonizó el quinto mitin una delirante jornada diaria del último fin de semana de campaña. El evento comenzó cerca de la media noche y se extendió durante 90 minutos.
Cientos de seguidores balanceaban sus manos al compás de un himno salsero que pide el voto para el Presidente a quien recibieron como un rockstar cuando descendió del Air Force One. “¡Dios mío, cuánta gente!”, comentó el mandatario cuando subió al escenario.
Los críticos del mandatario destacaron la aglomeración de personas en el lugar, a pesar del elevado riesgo de contraer coronavirus en la muchedumbre. También se criticó el hecho de que el evento se realizó en un horario que violenta el toque de queda impuesto en Miami-Dade desde la medianoche a las 6:00 de la mañana con el propósito de frenar los contagios.
Los seguidores del republicano se reunieron en la pista de terminal aéreo que fue seleccionado para esta actividad política porque la orden de emergencia implementada por el alcalde condal Carlos Giménez para restringir el tamaño de reuniones a 10 personas no incluye ningún aeropuerto.
“Este es el último mitin del día, así que podemos quedarnos toda la noche aquí”, comentó Trump ante un alegre público minutos después de aterrizar a las 11:35 de la noche. Previamente asistió a eventos similares en Michigan, Iowa, Carolina del Norte y Georgia.
“¡Qué agradable! Nos podemos tomar nuestro tiempo. Les puedo contar cuentos. Este es un grupo importante, ¿no es así?”, añadió Trump, quien en su alocución atacó a su contrincante Joe Biden y a los demócratas en general acusándolos de querer quitarle el derecho a poseer armas de fuego a los estadounidenses, aumentar los impuestos, hundir la economía, causar una depresión y adoctrinar a sus hijos con mentiras antiamericanas.
Tampoco olvidó un tema relevante para muchos inmigrantes latinoamericanos en Florida que huyeron de regímenes de izquierda. “Nuestros oponentes quieren convertir a nuestro país en una Cuba comunista o en una Venezuela socialista, pero no lo vamos a permitir,” prometió.
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En otra parte de su discurso criticó los cierres de negocios y demás establecimientos debido al coronavirus, al que ha denominado “la plaga de China”. Aseguró que está en camino y pronto estará disponible una “vacuna segura” contra la COVID-19.
Hasta el domingo 1 de noviembre Florida había registrado cerca de 16.800 decesos por el nuevo coronavirus según cifras del Departamento de Salud del estado. Sin embargo, ni el Presidente ni sus seguidores se mostraron inquietos por la pandemia durante el mitin.
Trump recalcó que Florida es uno de los estados decisivos. “Saben, si ganamos Florida, ganamos todo”, comentó a sus seguidores en el aeropuerto de Opa-locka.
“No dejen de salir a votar el martes. Será un día muy emocionante”, concluyó.