La nota especial del encuentro fue el regreso de Tony Parker a casa por primera vez como rival. El base francés jugó por primera vez en el AT&T Center como visitante tras 17 temporadas vistiendo la camiseta de la franquicia texana.
Antes del partido, Parker fue objeto de un homenaje de los Spurs con un video que mostraba sus logros más significativos en su carrera en San Antonio, incluyendo el momento en que fue reclutado con la 28va selección del draft de 2001 y sus cuatro campeonatos de la NBA con el equipo.
El francés es una gran referencia en Texas. Máximo asistente en la historia de la franquicia (6.829 pases), durante 17 temporadas fue admirado por los seguidores de los Spurs y escribió junto a Manu Ginóbili y Tim Duncan las páginas más gloriosas del equipo con cuatro anillos.
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De allí la ovación que le brindó el público cuando salió para acabar el primer cuarto. La multitud rugió: “¡Tony!, ¡Tony!, ¡Tony!”.Parker tuvo ocho puntos, cuatro asistencias y tres rebotes en su primer juego de vuelta en San Antonio, luego de firmar con los Hornets en la pretemporada.
Justo como lo hizo durante 17 temporadas con los Spurs, el base escurridizo esquivó defensivos y se coló al área en busca de encestes o pasar el balón a compañeros desmarcados. Una colada suya puso a los Hornets arriba 82-79 con 8:15 por jugar.
El encuentro en donde los Hornets vencieron a los Spurs 108-93 estuvo dominado de principio a fin por la figura deKemba Walker, que terminó el duelo con33 puntos (13 de 27 en tiros de campo) y cinco asistencias, emergiendo como figura imparable para el equipo de San Antonio.
Jeremy Lamb añadió 19 unidades y Marvin Williams tuvo 11 para Charlotte, que puso fin a un bache de tres derrotas.
Al acabar el encuentro, llegó otro de los grandes momentos de la noche. Popovich, su único entrenador en la NBA hasta este curso, y el base francés se fundieron en un cálido abrazo. Un emotivo Parker afirmó “Siempre amaré a los Spurs”.
Por: José Espinoza