Los tiempos modernos son convulsos. Los acontecimientos negativos suceden con frecuencia y parecen no acabar. ¿Cuál es la cantidad de acontecimientos históricos negativos que puede vivir el ser humano sin que ello haga mella en su salud mental? Hay un pico de trastornos de depresión y ansiedad diagnosticados según un estudio publicado en la revista científica The Lancet. ¿Cómo encontrar el equilibrio?
La cifra aumentó en 129 millones de casos -un 25%- solo en 2020. Con la explosión del conflicto en Ucrania, la incertidumbre, impotencia o incluso miedo, sobrepasan las capacidades de las personas, pero no se sabe a ciencia cierta cómo reaccionar.
«Es posible y necesario encontrar un término medio», explicó el equipo de TherapyChat. «Es importante informarnos y tomar conciencia de lo que ocurre a nuestro alrededor; en este caso, las miradas de todo el mundo se encuentran en lo que ocurre en el conflicto bélico, y todo ello tendrá un efecto en todos los países, pero también en nuestras emociones. De nada servirá tener una sociedad informada pero incapaz de gestionar sus propias emociones, teniendo así un efecto negativo en la salud mental de todos», desarrollaron en una publicación de Vogue.
Pero al mismo tiempo, la vida continúa y tampoco tiene sentido aislarse de la misma, ahí se habla de equilibrio. Desde la plataforma de psicología recomiendan tres pautas:
- Lo más importante en estas situaciones es dar cabida a esta preocupación, es decir, permitirnos hablar sobre este tema
- Es importante mantener nuestras rutinas y actividades cotidianas, no parar nuestro reloj y ser conscientes de que es probable que entretanto surgirán pensamientos relacionados con los conflictos
- Será importante saber parar y practicar el autocuidado. La información llega por muchas vías y de manera descontrolada, en la televisión, las redes sociales, periódicos e incluso en anuncios en plataformas de reproducción de música
A su vez, la Organización Mundial de la Salud advirtió de un fuerte incremento en la prevalencia de la ansiedad y la depresión relacionadas con la pandemia de COVID-19 derivadas en gran medida del aislamiento social, y señaló que los jóvenes y las mujeres son los más afectados.
El 90 por ciento de los países estudiados incluyeron salud mental y apoyo psicosocial en sus planes de respuesta a la COVID-19, pero aún hay importantes brechas y preocupaciones.
El más reciente «Atlas de la Salud Mental» de la OMS mostró que, en 2020, los Gobiernos de todo el mundo gastaron en promedio poco más de dos por ciento de sus presupuestos de salud en salud mental y muchos países de bajos ingresos reportaron menos de un trabajador de salud mental por cada 100.000 habitantes.
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¿Cómo está la salud mental en Estados Unidos?
De acuerdo a Mental Health America, hay algunas claves importantes a conocer sobre la salud mental en EE. UU.
- Las ideas suicidas continúan aumentando entre los adultos en los EE. UU. El 4,58 % de los adultos informa tener pensamientos suicidas graves, un aumento de 664 000 personas con respecto al conjunto de datos del año pasado. La tasa nacional de ideación suicida entre adultos ha aumentado cada año desde 2011-2012. Este fue un aumento mayor que el observado en el informe del año pasado y es una tendencia preocupante de cara a la pandemia de COVID-19.
- Un porcentaje creciente de jóvenes en los EE. UU. vive con depresión mayor. El 15,08 % de los jóvenes experimentó un episodio depresivo mayor el año pasado, un aumento del 1,24 % con respecto al conjunto de datos del año pasado. En los estados peor clasificados, hasta el 19% de los jóvenes de 12 a 17 años experimentaron depresión mayor.
- Más de 2,5 millones de jóvenes en los EE. UU. tienen depresión grave y los jóvenes multirraciales corren el mayor riesgo. El 10,6% de los jóvenes en los EE. UU. tienen depresión mayor grave (depresión que afecta gravemente el funcionamiento). La tasa de depresión severa fue más alta entre los jóvenes que se identificaron como más de una raza, con un 14,5 % (más de uno de cada siete jóvenes multirraciales).
- Más de la mitad de los adultos con una enfermedad mental no reciben tratamiento, con un total de más de 27 millones de adultos en los EE. UU. que no reciben tratamiento. En Hawái, el estado peor clasificado, el 67 % de los adultos con una enfermedad mental no recibió tratamiento. Incluso en Vermont, el estado mejor clasificado de EE. UU., el 43 % de los adultos que padecían una enfermedad mental no recibían tratamiento.
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