Con las imágenes todavía frescas del atentado en carro bomba en la Escuela de Policía de Bogotá, el presidente colombiano Iván Duque, ha lanzado una nueva estrategia contra las organizaciones criminales al ofrecer recompensas a quien aporte información que permita la captura de los líderes de estos grupos.
El mayor estímulo será por información sobre los cabecillas del Ejército de Liberación Nacional, grupo guerrillero responsable del ataque en la Escuela de Policía General Santander, el 17 de enero, que dejó 22 muertos y 67 heridos.
En total son 4.000 millones de pesos (1,2 millones de dólares) “por criminales como alias ‘Gabino’, alias ‘Pablito’ o como alias ‘Antonio García’, del grupo ELN”, anunció Duque al término de una reunión del consejo de seguridad.
Gustavo Aníbal Giraldo Quinchía, alias “Pablito”; Eliécer Herlinto Chamorro Acosta, alias “Antonio García”, y Nicolás Rodríguez Bautista, alias “Gabino”, máximo líder del ELN, integran el Comando Central de esa guerrilla.
La máxima línea de mando del ELN la conforman también Israel Ramírez, alias “Pablo Beltrán”, y Rafael Sierra Granados, alias “Ramiro Vargas”.
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Según el mandatario, la nueva campaña busca combatir a los grupos señalados de asesinar a líderes sociales y defensores de derechos humanos.
El presidente colombiano también anunció las recompensas que entregará el Estado por información sobre dirigentes de otros grupos.
Se entregarán 3,000 millones de pesos (966.000 dólares) por información con la que se logre capturar a Darío Antonio Úsuga David, alias “Otoniel”, máximo líder del Clan del Golfo, una banda que se levantó su poderío después de la desmovilización de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) en 2006.
Por Miguel Botache, alias “Gentil Duarte”, y Luis Antonio Quiceno, alias “Pácora”, cabecillas de Los Pelusos, un reducto del Ejército Popular de Liberación (EPL), se ofrecieron 2,000 millones de pesos (unos 644,000 dólares).
Las autoridades entregarán 500 millones de pesos (161,000 dólares) como recompensa por información sobre otros 28 criminales.
La estrategia, indicó Duque, pretende hacer saber a los grupos criminales que todo un país los está persiguiendo. “No queremos más asesinatos de líderes, no queremos más terrorismo, no queremos más secuestros y no queremos más extorsión”.