República Dominicana lo tiene todo. Así lo afirma su eslogan y lo reafirman sus visitantes. Rodeada por el Océano Atlántico hacia el Norte y el Mar Caribe hacia el Sur, el país cuenta con más de 1,600 Km. de costa y 400 Km. de las mejores playas del mundo con arena blanca y aguas turquesas, acompañadas de hoteles y resorts, e infinidad de opciones en deportes, entretenimiento y recreación.
De acuerdo a Ministerio de Turismo del país, es el destino más visitado cada año en el Caribe, y el año pasado superó su récord turístico con 11 millones de personas. Opciones como Miches, Samaná, Santiago y Costa del Ámbar son una apuesta para mostrar la diversidad natural, la belleza de sus aguas y la propuesta cultural de República Dominicana.
“Es la principal industria de nuestro país, representa un 15% de nuestro PIB y genera una entrada de divisas de más de 10.000 millones de dólares cada año, generando más de un millón de empleos de manera directa e indirecta. Por todo eso, República Dominicana ha abrazado el turismo”, explicó el ministro de Turismo del país caribeño, David Collado.
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En total, Quizqueya cuenta con más de 200 playas, muchas aún permanecen vírgenes. Hay playas de arena blanca brillante y playas con arena negra que se extienden hacia el suroeste. También hay un tramo de 48 kilómetros de aguas paradisíacas ininterrumpida de Punta Cana.
Igualmente, una visita obligatoria es Samaná un paraíso natural donde las montañas se funden con el mar. Está en la costa noreste de República Dominicana, la península emerge como un destino único, donde exuberantes montañas y valles se encuentran con playas de arena blanca y aguas cristalinas. Pero la belleza de Samaná no se limita a sus paisajes. Cada año, la bahía se convierte en el escenario de un espectáculo impresionante: la llegada de miles de ballenas jorobadas.