Los hechos de violencia están detrás del 80% de los casos de migrantes con problemas agudos de salud mental en la frontera sur de México, según alertó el responsable de base de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Tapachula, la principal ciudad mexicana en el límite con Centroamérica.
“El mayor detonante de situaciones de salud mental agudas no son las condiciones de vida en las que están los migrantes, sino la violencia en el 80% de los casos”, aseguró a medios locales Sinaí Guevara, responsable de MSF en la zona.
La organización refirió que los migrantes en la frontera sur de México enfrentan la violencia y los peligros en la zona donde ha aumentado la disputa entre grupos criminales para controlar el tráfico de personas y de drogas.
Representantes de la organización han descubierto que los migrantes se encuentran en su ruta a los mismos perpetradores de los que están huyendo, por lo que “les acompaña la incertidumbre y el miedo”.
Guevara dijo que las solicitudes de asilo han caído casi en un tercio en lo que va del 2024 en México tras el récord de casi 141.000 peticiones en 2023, pero los niveles de violencia no han disminuido.
Advirtió de que los migrantes que cruzan a México “probablemente vayan a sufrir violencia” en el país.
Además, la migración irregular a través de México aumentó un 193% interanual en la primera mitad de 2024 hasta un récord de más de 712.000, según datos del Gobierno.
Ante esta situación, Guevara señaló que en Suchiate, donde la organización MSF brinda atención primaria a los migrantes, perciben “mucha vulnerabilidad total porque no tiene las mínimas necesidades cubiertas, no tienen agua potable y ni higiene”.
La activista considera que las políticas de Estados Unidos causan incertidumbre entre los migrantes, quienes “tratan de apegarse a las leyes, pero cada vez que estas cambian los dejan con incertidumbre”.
Por otra parte, Fabiola Pintado, referente médico de MSF en Tapachula, manifestó que durante el primer trimestre del año otorgaron 2.056 consultas externas y 1.191 de salud mental.
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“Lo que vemos con mayor frecuencia son enfermedades respiratorias, gastrointestinales, algunas afectaciones de salud mental y enfermedades de la piel, estas patologías están relacionadas al contexto que ellos están viviendo”, comentó.
Dijo también que de enero a marzo atendieron 1.569 personas en salud primaria, mental y trabajo social, 1.004 solo en salud primaria, 405 en salud sexual y reproductiva, 478 consultas individuales de salud mental, y 32 casos de casos identificados de tratos crueles, inhumanos, violencia y tortura.