Donald Trump, dio inicio a una terapia con Remdesivir, el antiviral contra la COVID-19. El tratamiento comenzó a ser aplicado al Presidente de los Estados Unidos el viernes en la noche, pocas horas después de haber sido ingresado en el Centro Médico Militar Nacional Walter Reed, situado en la localidad de Bethesda, Maryland, en las afueras de Washington.
La información fue confirmada por la Casa Blanca, que indicó además que la hospitalización del jefe de Estado se hizo por “precaución” tras haber dado positivo a la prueba del nuevo coronavirus.
“El presidente Trump permanece con buen ánimo, tiene síntomas leves y ha estado trabajando durante todo el día. Por precaución y por recomendación de su médico y expertos, el Presidente trabajará desde las oficinas presidenciales del hospital Walter Reed los próximos días”, informó en un comunicado Kayleigh McEnany, portavoz de la Casa Blanca.
Por su parte, el médico presidencial Sean Conley explicó que “el presidente está muy bien. No requiere oxígeno adicional, pero en consulta con especialistas hemos optado por iniciar terapia con Remdesivir. Ha completado su primera dosis y descansa cómodamente”.
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La terapia con Remdesivir a Trump comenzó luego de que este viernes, cuando aún estaba en la Casa Blanca, le administraran una dosis del cóctel experimental de anticuerpos elaborado por la farmacéutica Regeneron.
Desde su reclusión en el hospital de Maryland, en su cuenta Twitter el mandatario estadounidense escribió: “Me va bien, ¡creo! Gracias a todos. ¡¡¡AMOR!!!”.
Going welI, I think! Thank you to all. LOVE!!!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) October 3, 2020
Trump fue transportado en el helicóptero presidencial desde la Casa Blanca hasta el Hospital Militar Walter Reed.
Melania Trump, la esposa del Presidente, también dio positivo a COVID-19 y según informó el doctor Conley, “sigue estando bien, solo con una leve tos y dolor de cabeza. El resto de la familia Trump se encuentra bien y dieron negativo por SARS-CoV-2”.
El jede de Estado que tiene 74 años, junta algunos de los factores de riesgo que permiten el desarrollo de síntomas más graves del nuevo coronavirus. COVID-19. Por ejemplo su edad, género y peso.