“He ordenado a la Armada de EE.UU. que derribe y destruya todos y cada uno de los cañoneros iraníes si llegan a hostigar nuestros barcos en el mar”.
La orden transcrita en el párrafo anterior corresponde a un tuit publicado por el presidente de los Estados Unidos Donald Trump, quien ha instruido a su cuerpo de guerra a responder a voluntad de darse un hostigamiento por parte de buques iraníes que la emprendan de forma armada contra embarcaciones estadounidenses que naveguen por el golfo Pérsico.
El presidente Donald Trump anunció este miércoles que ha ordenado a la Armada de su país “derribar y destruir” buques iraníes si llegan a “hostigar” embarcaciones estadounidenses en el golfo Pérsico.
I have instructed the United States Navy to shoot down and destroy any and all Iranian gunboats if they harass our ships at sea.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) April 22, 2020
La decisión de usar una respuesta de naturaleza bélica a cualquier evento que se determine como una hostigación, se ha producido con siete días de separación desde que el Pentágono denunciara que once embarcaciones de la Guardia Revolucionaria iraní se aproximaron a buques de guerra estadounidenses en el golfo Pérsico y calificó los movimientos de “peligrosos”.
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Frente a los hechos hay que destacar que la Guardia Revolucionaria iraní está clasificada por los Estados Unidos como grupo terrorista y algunos de sus altos mando han sido objetivos militares eliminador por las fuerzas armadas estadounidenses.
La República Islámica de Irán ha señalado en justificación de sus movimientos frente a la presencia de fuerzas militares estadounidenses en el golfo Pérsico, que la presencia de esas tropas es ilegal y solicitó a la gran potencia militar de América abandonar “lo antes posible” esta región.
La tensión entre Teherán y Washington escaló dramáticamente en el golfo Pérsico el año pasado al registrarse en esa zona una serie de ataques y sabotajes entre mayo y septiembre contra buques militares y comerciales o instalaciones petroleras en Arabia Saudí.
Además, el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, criticó este miércoles al lanzamiento con éxito del primer satélite militar de la República Islámica.
“Creo que Irán debe rendir cuentas por lo que ha hecho”, dijo el titular de Exteriores, que consideró que Teherán ha violado una resolución de Naciones Unidas que prohíbe el lanzamiento de misiles militares.
“Todas las naciones tienen la obligación de evaluar si el lanzamiento de Irán es congruente con las resoluciones del Consejo Nacional de Naciones Unidas”, aseveró.
La Guardia Revolucionaria de Irán lanzó hoy con éxito el primer satélite castrense iraní para mejorar su capacidad defensiva.
El cuerpo militar de élite explicó en un comunicado que Nur-1 (Luz-1) fue puesto en órbita por el lanzador en dos etapas Qased (Mensajero), también de fabricación local, a una altitud de 425 kilómetros.
Estados Unidos es muy crítico con el programa espacial iraní, ya que cree que, detrás de estos intentos, la República Islámica oculta un proyecto para desarrollar misiles balísticos con capacidad para llevar ojivas nucleares y viajar a grandes distancias.
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A esto se suma que Washington declaró hace un año a la Guardia Revolucionaria grupo terrorista y las fuerzas armadas de ambos países han protagonizado varios incidentes en el golfo Pérsico.
EE.UU. asesinó además en enero pasado en un bombardeo en Bagdad al poderoso general de la Guardia Revolucionaria Qasem Soleimaní, lo que provocó una grave escalada de la tensión en la región.