Spark Therapeutics, la afamada firma de biotecnología estadounidense asentada en Filadelfia, está bajo el radar del grupo farmacéutico suizo Roche, quien tiene todo dispuesto para hacerse de la estructura accionaria de la empresa con el deseo de catapultar sus visionarios tratamientos médicos.
Desde su nacimiento, Spark Therapeutics tuvo como misión desafiar la inevitabilidad de las enfermedades genéticas, descubriendo, desarrollando y ofreciendo tratamientos potenciales de manera inimaginable.
El éxito de la empresa filadelfiana que vio la luz en el año 2013 llamó la atención de los grandes inversionistas, que más allá del conocimiento del valor y comportamiento de las acciones, tienen la seguridad del éxito que envuelve su plataforma patentada de terapia génica adeno-viral (AAV) con la excelencia en I+D, fabricación y operaciones comerciales.
De acuerdo a The Wall Street Journal, Roche podría estar ofreciendo un precio de 5 mil millones de dólares, lo que supondría una importante prima para los accionistas de la compañía estadounidense, pues Spark tenía al cierre de la semana pasada un valor bursátil ligeramente por debajo de los US$ 2 mil millones.
Spark Therapeutics, Inc. con sede en el 3737 Market Street, Filadelfia, es el resultado de la tecnología y los conocimientos acumulados durante dos décadas en el Children’s Hospital de Filadelfia.
La firma de biotecnología es propietaria de terapias de investigación que tienen el potencial de proporcionar efectos duraderos, cambiando drásticamente y positivamente las vidas de pacientes con afecciones, donde no existen, o solo existen terapias paliativas.
Una mayor comprensión del genoma humano y las anomalías genéticas han permitido a los científicos de Spark Therapeutics adaptar terapias de investigación a pacientes que padecen enfermedades genéticas muy específicas. Este enfoque es muy prometedor en el desarrollo de tratamientos efectivos para una gran cantidad de enfermedades hereditarias.
Con la operación bursátil, Roche buscaría sobre todo ampliar sus tratamientos contra la hemofilia con terapias genéticas en las que Spark está especializada.
La firma estadounidense, con sede en Filadelfia se centra en terapias en las que un gen defectuoso es reemplazado por uno sano, un área de gran avance en los últimos años pero que aún está por estallar.
La empresa de Filadelfia ha colaborado con el gigante Pfizer en el desarrollo de un tratamiento para la hemofilia y en 2017 una terapia genética suya contra una condición que puede causar ceguera fue la primera de este tipo en recibir la aprobación de los reguladores estadounidenses.
Las grandes empresas farmacéuticas han aumentado en los últimos años su interés por este tipo de negocios. El año pasado, Novartis pagó por ejemplo 8 mil 700 millones de dólares por la firma AveXis.
Roche es uno de los grandes del sector farmacéutico a nivel global, con más de 90 mil empleados y una facturación en 2018 de unos 56 mil 800 millones de dólares.
Spark Therapeutics, más allá de su venta, seguirá siendo una compañía totalmente integrada y comprometida con el descubrimiento, desarrollo y administración de terapias genéticas, que desafíen la inevitabilidad de las enfermedades genéticas, incluidas la ceguera, la hemofilia, los trastornos de almacenamiento lisosomal y las enfermedades neurodegenerativas.