En la última década, las muertes por sobredosis en todo Estados Unidos eran alarmantes. En los años recientes los números han bajado con mucha esperanza, en New Jersey específicamente, entre 2022 y 2023 los fallecidos disminuyeron en todos los grupos étnicos y raciales. En 2023 hubo 2816, pero en 2022 el número ascendía a 3171.
Se estima que en NJ existen 53 centros de reducción de daños, en comparación al inicio de la administración Murphy, cuando solo existían siete, es un gran número que amplía la atención basada en la evidencia con medicamentos. En cada uno de los 21 condados de New Jersey tienen al menos un Centro de Reducción de Daños, su presencia también reduce la propagación de infecciones como el VIH y la hepatitis C. Este enfoque salva vidas y previene hospitalizaciones costosas.
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«La epidemia de opioides ha tenido un impacto devastador en nuestra nación y demasiadas familias han sufrido sus consecuencias. Al prestar atención a los datos y priorizar las estrategias de reducción de daños durante los últimos siete años, hemos construido un marco de apoyo para reducir los daños del uso de sustancias, agilizar el acceso al tratamiento y apoyar a las familias en la recuperación», dijo el gobernador Phil Murphy.
«Estas estrategias están salvando vidas. Me alegra ver esta reducción en las muertes por sobredosis y espero con interés el impacto que nuestra creciente red de Centros de Reducción de Daños tendrá en nuestro trabajo para poner fin a la crisis de opioides», agregó.