La narradora es Enriqueta Aragonez. La historia sobre este supercontagio la divulgó Andrea Salcedo del The Washington Post. Quince parientes de una misma familia están ansiosos para que todos sepan que el aumento de contagios por la COVID-19 es cierto. Esta numerosa familia de Texas pagó las consecuencias tras encontrarse para celebrar un cumpleaños. En el subtítulo del Post la señora Enriqueta advierte: “Por favor, no seas como mi familia”.
Quince integrantes de la familia Aragonez de Texas están afectados por la COVID-19. Las reuniones en los interiores de las casas se han transformado en cámaras de contagios. El frío obliga a la gente a estar en la calidez de los “living”. Justamente allí es que se lleva a cabo el supercontagio.
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“Fui a la casa de mi sobrino y me encantó ver a mi familia. Ahora estoy luchando contra la COVID-19″, dijo Aragonez en un mensaje de video. “Por favor, protégete. Es real”.
Afectada numerosa familia de Texas
Enriqueta Aragonez es uno de los 15 miembros de la familia que contrajeron el coronavirus después de celebrar un cumpleaños. La ocasión se desarrolló bajo techo a principios de este mes. Nadie usó máscaras. Semanas más tarde, apareció un emotivo vídeo compartido por la ciudad de Arlington. La familia está rogando a otros que eviten reunirse con alguien fuera de su hogar inmediato.
Alexa Aragonez, la hija de Enriqueta, habló con The Washington Post el domingo. “Por supuesto que lamentamos reunirnos. Tenemos en mente que esto podría ser una lección para todos nosotros”. “Un momento de descuido nos ha costado un mes de paz, nos ha costado el sueño, nos ha costado la risa, nos ha costado mucho dinero.”
Texas no marcha bien
El caso de la numerosa familia de Texas contagiada es solo la punta del iceberg en el estado de la Estrella Solitaria. Mientras que los casos de coronavirus en EEUU continúan aumentando en números récord, la situación en Texas es terrible.
Este fin de semana, la Guardia Nacional del estado desplegó un equipo de 36 miembros para ayudar en las morgues de El Paso. El estado reportó 13.763 nuevos casos el sábado, según el rastreador de coronavirus de The Post. Al menos 20.556 texanos han muerto de COVID-19.
La gente de color, incluyendo a los latinos como la familia Aragonez, que son méxico-americanos, continúan sufriendo un aumento en la tasa de mortalidad por COVID-19, según un análisis del Post.
Los funcionarios de salud siguen registrando los eventos de súper propagación en grandes reuniones como las bodas. No obstante las reuniones más pequeñas como el almuerzo bajo techo de los Aragónez han provocado el último pico de casos de coronavirus.
Se trata de una tendencia que podría empeorar dramáticamente, advierten los expertos en salud. Si los estadounidenses ignoran las pautas de los CDC habrá más contagios. Las autoridades sanitarias están solicitando a la gente a no viajar durante las fiestas de este año.
Crónica de un supercontagio
Según el trabajo periodístico de Andrea Salcedo, el 1° de noviembre se selló el destino de los Aragonez. Aunque son americanos pertenecen a una de las minorías más afectadas por la COVID-19: Los latinos.
Una de las primas envió un mensaje a un grupo de parientes: “¿Quieren venir a comer fajitas?”. Se trató de una improvisada y tardía celebración de cumpleaños. La numerosa familia de Texas había acordado al principio de la pandemia evitar cualquier reunión con personas ajenas a la familia.
Nada de reuniones en servicios de la iglesia, bares o cenas interiores y exteriores. También planeaban trabajar desde casa tanto como fuera posible, dijo Aragonez. Asimsimo redujeron sus habituales reuniones familiares semanales a reuniones al aire libre, una vez al mes, socialmente distanciadas.
“Todos dijeron que sí, sólo porque nos hemos cuidado muy bien desde el comienzo de la pandemia”, aseguró Aragonez sobre la invitación de su primo. “… Nuestra familia puso un fuerte énfasis en cuidar de uno mismo todos los días para que pudiéramos vernos con más paz y no tener miedo de contraer la COVID 19.”
La COVID-19 les llegó a todos
La historia es casi irreal. “Todos. No se perdió ni uno solo”, dijo Aragonez. “Todos los que fueron al evento dieron positivo.” Otros tres parientes que no fueron a la fiesta de cumpleaños también contrajeron el virus.
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La madre de Aragónez, Enriqueta, tuvo el caso más peligroso. El 12 de noviembre le diagnosticaron una neumonía grave en ambos pulmones. Un día después, fue ingresada en un hospital de Arlington. Tosía sangre y el virus le había causado daños en el corazón. Estuvo allí una semana, pero desde entonces ha empezado a recuperarse y ha vuelto a casa.
Este año, Aragonez y su hermana, que también ha dado negativo para el virus, cocinarán y entregarán comidas a los parientes que aún se están recuperando y aislando. Harán una fiesta de Zoom después del partido de fútbol de los Cowboys, dijo.