El régimen de Nicolás Maduro publicó este viernes el cronograma de racionamiento eléctrico que se aplicaría en Venezuela, con excepción de Caracas y otros tres estados, según el cual los ciudadanos se quedarán sin luz al menos 18 horas por semana.
El ministerio de Energía Eléctrica y de la estatal Corporación Eléctrica (Corpoelec) diseñaron un esquema que divide a 20 de los 23 estados de Venezuela en cinco sectores que en diferentes horarios serán sometidos al llamado “plan de administración de carga”, que en este caso se trata de apagones diarios de tres horas.
Según este plan, un día a la semana cada sector contará con el fluido de energía las 24 horas.
La medida de racionamiento excluye al estado Vargas (zona centro norte costera), cercano a Caracas y donde se ubica los principales puerto y aeropuerto de Venezuela, y a Amazonas y Delta Amacuro que son regiones fronterizas, alejadas de la capital y con muy baja densidad poblacional.
Maduro anunció el domingo la puesta en marcha del racionamiento que duraría 30 días, pero hasta este viernes no se conocían detalles del cronograma y los cortes eléctricos han sido de más de 12 horas continúas en la mayoría de las regiones.
Te puede interesar:Exviceministro chavista alertó la inminencia de otro apagón en Venezuela
Los cortes programados de luz son la respuesta del régimen ante la crisis eléctrica que atraviesa el país desde el 7 de marzo, cuando inició una secuencia de apagones que ha paralizado a Venezuela.
Los fallos han persistido esta semana, sobre todo en el oeste del país, donde comunidades enteras pasaron más de 100 horas a oscuras.
El chavismo gobernante ha responsabilizado a Estados Unidos y a la oposición venezolana de un supuesto sabotaje al suministro de energía afirmando que ha habido ataques “electromagnéticos” y “con fusil de larga distancia” contra el sistema eléctrico.
Tras ello, anunciaron la modernización, intervención y reestructuración del sistema, custodiado por militares desde 2013, a fin de poder “enfrentar estos ataques” en el futuro.
La oposición de Venezuela, en cambio, culpa al Ejecutivo de los fallos en el sistema, al señalar que la ineptitud y la mala gestión de los millonarios recursos destinados al sector eléctrico fueron las causas reales del corte.
En 2010, el régimen decretó por primera vez el estado de emergencia en el sector eléctrico e impuso la primera dieta eléctrica, de la que se salvó Caracas, que se extendió durante cuatro meses y consistió en cortar la luz unas 24 horas por semana a cada ciudadano.
Desde entonces los apagones se fueron haciendo más frecuentes, especialmente en regiones como Zulia (estado fronterizo con Colombia), donde en la última década se han aplicado varios planes de racionamiento y cortes no anunciados del servicio.