Las autoridades mexicanas disolvieron la caravana migrante que partió la mañana de este sábado 4 de septiembre desde el municipio de Tapachula, Chiapas, en la frontera con Guatemala, y que tenía como destino Estados Unidos.
Esta era la cuarta caravana migrante que había iniciado su camino en el sur del país azteca, y fue desintegrada en menos de 24 horas en el municipio de Huixtla luego de haber recorrido poco más de 40 kilómetros.
A las 5:00 de la mañana (hora local) agentes del Instituto Nacional de Migración (INM) de México y de la Guardia Nacional emprendieron un operativo con el propósito de disgregar a este cuarto grupo de migrantes conformado por unas 500 migrantes en su mayoría haitianos, cubanos, venezolanos y centroamericanos.
En primera instancia los uniformados primero recorrieron las calles del municipio para detener a los migrantes que deambulaban por las calles. Después llegaron a la instalación en la que la mayoría de los migrantes pernoctaron.
La caravana intentaba continuar su caminata este domingo 5 de septiembre para llegar al municipio de Villa Comaltitlán distante unos 18 kilómetros de la localidad de Huixtla. Con equipos antimotines los funcionarios de la Guardia Nacional atajaron a la mayoría de los migrantes, entre los que iban mujeres y niños.
Las autoridades mexicanas detuvieron a unas 50 migrantes quienes se resistieron a subir a las unidades de traslado del Instituto Nacional de Migración. Luego de la dispersión, algunos migrantes corrieron a la ribera del río Huixtla para evitar ser capturados.
En medio de la escaramuza, con gritos y llanto, abrazados los unos con los otros los migrantes detenidos fueron embarcados en varios autobuses que los condujeron de nuevo a la frontera sur mexicana.
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Después de estas detenciones, los uniformados pusieron en marcha un operativo de búsqueda y captura de migrantes en calles, avenidas, parques, ribera del río Huixtla y otros lugares donde los migrantes se escondieron.
En el municipio de Tapachula frontera con Guatemala, se conformaron cuatro caravanas migrantes desde el pasado fin de semana y la última partió este sábado. Todas avanzaron varios kilómetros pero fueron dispersadas por funcionarios de los organismos de seguridad mexicanos.
Agencias de la ONU y organizaciones defensoras de migrantes denunciaron que los funcionarios mexicanos han empleado uso excesivo de la fuerza durante las detenciones.
El Instituto Nacional de Migración informó que desde el 1 de enero al 31 agosto del presente año, México ha identificado en su territorio a 147.033 personas migrantes en condición irregular.
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