Como cada cuatro de julio, las tradiciones se hacen presentes. Estados Unidos se prepara para el Día de la Independencia entre las ganas de celebrar y el temor a una segunda ola. Esta vez, la fiesta será diferente. Muchas ciudades anunciaron que no habrá fuegos artificiales, lo que marca un gran asterisco en la historia de este feriado estadounidense.
Pero en medio del confinamiento, muchos estadounidenses saldrán este fin de semana por primera vez con deseos de sol y diversión, sin embargo, como es costumbre en este tiempo tan convulso, en dos semanas aproximadamente, se sabrá si se ejecutaron los cuidados pertinentes. La candidata demócrata al Congreso, Mia Manson, dijo a la cadena DW que teme por un aumento de casos en su comunidad, Maryland.
«Es temporada turística, es el 4 de Julio y la gente no está respetando el distanciamiento social ni usa tapabocas cuando pasea por nuestras playas. No creo que el presidente Trump haga nada. Seguirá diciendo que todo es un engaño y seguirá desmintiendo las evidencias científicas. Seguirá provocando muchos casos y muertes», aseguró.
El origen de esta celebración es del 4 de julio de 1776, cuando los representantes de las 13 colonias británicas que radicaban en EE.UU. decidieron reconocer a este sitio como nación independiente. El acuerdo se dio después que los representantes firmaran una Declaración de Independencia y es por ello que el 4 de Julio es un día memorable en la historia. Tiempo después, concretamente el 28 de junio de 1870 las autoridades proclamaron el 4 de Julio como un día feriado federal.
También hay algo muy curiosos con este día, y es que varios presidentes de Estados Unidos han muerto el 4 de julio. John Adams y Thomas Jefferson lo hicieron en 1826, y James Moore en 1831. También ha habido un presidente que ha nacido este día. Calvin Coolidge nació el 4 de julio de 1872.