En el mítico Stade de France, una de las más grandes obras arquitectónicas del siglo XX situado al norte de París se definirá la supremacía del fútbol del Viejo Continente.
El 28 de mayo se verán las caras dos titanes. El Real Madrid y el Liverpool se enfrentarán por tercera vez en una final de la Liga de Campeones, tras eliminar en semifinales al Villarreal y Manchester City, respectivamente.
Los Reds y los Blancos chocaron por el título en París en 1981 y en Kiev en 2018. La primera vez ganó el cuadro inglés por 1-0 y los merengues se después se vengaron por 3-1.
El 27 de mayo de 1981 un tanto anotado por Alan Kennedy a los 82 minutos le otorgó el triunfo al Liverpool dirigido por el técnico Bob Paisley ante el denominado Real Madrid del yugoslavo Vujadin Boskov.
Luego, el 26 de mayo de 2018, en el Olímpico de Kiev, el cuadro del francés Zinedine Zidane obtuvo su tercer título consecutivo y el decimotercero de su historia. El Madrid resolvió las papeletas por 3-1 sobre el conjunto que dirigía el germano Jurgen Klopp.
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En esa oportunidad la aciaga actuación del portero alemán Loris Karius junto a la temprana lesión del egipcio Mohamed Salah y la descollante actuación del galés Gareth Bale, autor de un doblete, le otorgaron la orejona a la oncena madrilista.
Ahora, en París ambos equipos volverán a verse las caras en una final del Viejo Continente para desempatar sus enfrentamientos particulares dentro de la máxima competición continental.
El Real Madrid es el conjunto que atesora más títulos, con 13. Además, es el único equipo que ha participado en mayor cantidad de finales, con 17. Para los madrilistas las finales no se juegan, se ganan. El Liverpool, por su parte, dispone de seis orejonas en su galería. También la oncena inglesa ha disputado diez finales en su historia.
Los analistas aseguran que la final será una apasionante batalla táctica entre los Reds, de Jürgen Klopp y los Merengues, de Carlo Ancelotti. Será un duelo entre la escuela táctica alemana contra el nuevo “catenaccio” italiano.
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Los viejos conocidos
Ancelotti y Klopp son dos viejos conocidos. El balance entre ambos técnicos con diferentes clubes es el siguiente: tres victorias y tres derrotas para cada uno, con tres empates.
En esta temporada el Liverpool es considerado un rodillo por la verticalidad, los pases a profundidad y además porque no le permiten a sus rivales tocar el balón.
De memoria juega la maquinaria compuesta por Alisson, Alexander-Arnold, Fabinho, Thiago Alcántara, Mané, Salah, Luis Díaz.
El Real Madrid cuenta con su secreto como una aceitada y experimentada sala de máquinas. Allí están los mediocampistas Toni Kroos, Luka Modric y Carlos Henrique Casemiro.
El brasileño Casemiro es el sostén en transición defensiva y el apagafuegos de los osados delanteros y laterales, toda una apisonadora de rivales. El croata Modric es un genio y motor incansable que lo llevó a conquistar el Balón de Oro en 2018 y el alemán Kroos, es el prototipo de la precisión quirúrgica para imponer su ley con sus pases. La sangre joven del Madrid con Rodrygo, Vinicius y el artista Benzemá se encarga del resto.