Problemas de concentración, impulsividad, inquietud y organización, son síntomas claves en la presencia de Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), aunque es muy conocido en niños, también lo padecen adultos, y de hecho, hay primeros diagnósticos en esta etapa.
El TDAH puede ser perjudicial para las relaciones sociales y el rendimiento laboral, pero existen tratamientos eficaces para controlar los síntomas.
De acuerdo al National Institute of Mental Health, «este es un trastorno del desarrollo asociado con un patrón continuo de falta de atención, de hiperactividad o de impulsividad. Los síntomas pueden interferir considerablemente con las actividades y las relaciones diarias de una persona. Este trastorno comienza en la niñez y puede continuar hasta la adolescencia e incluso la edad adulta».
En edades adultas, la hiperactividad puede disminuir, pero los problemas con la impulsividad, la inquietud y la dificultad para prestar atención pueden continuar, señaló la Clínica Mayo.
Ahora bien, existe tratamiento luego de un diagnóstico que debe hacer un profesional; puede incluir medicamentos, asesoramiento psicológico (psicoterapia) y tratamiento para cualquier afección de salud mental que se presente junto con el TDAH.
Las complicaciones relacionadas al trastorno señalan bajo rendimiento laboral, desempleo, problemas económicos, consumo inadecuado de alcohol u otras sustancias, relaciones inestables, problemas de salud física o mental, baja autoestima, entre otros.