Sarah Elizabeth Cupp, la destaca periodista californiana quien es presentadora del espacio de CNN, SE Cupp, anunció el fin de semana que se desprendía del sombrero de “activista” y se colocaba el de periodista, y aun más, por razones emocionales renunciaba a su membrecía en la Asociación Nacional del Rifle de los Estados Unidos porque está cansada que detrás de cada masacre no pase nada en la nación.
Un impecable reporte periodístico sobre este hito fue elaborado por la comunicadora social Morgan Gstalter, una redactora excepcional del staff de The Hill, quien escogió con tino cada detalle para hacer de la renuncia de SE Cupp la National Rifle Association una decisión dirigida a la familia estadounidense.
Quien está próxima a cumplir dos años como presentadora de SE Cupp: Unfiltered, un programa de panel político, co-presentado por Andrew Levy , en HLN y más tarde CNN, dijo que “durante años, como ustedes saben, he salido en televisión y he defendido la Segunda Enmienda: el derecho a portar armas”, dijo Cupp.
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“He señalado que los criminales no siguen las leyes de armas de fuego y he defendido a la NRA y a sus miembros, propietarios de armas de fuego respetuosos de la ley como yo, que no tienen nada que ver con los tiroteos masivos o los crímenes violentos con armas de fuego. Lo he hecho porque soy dueña de un arma y defensora de los derechos de las armas y creía que era verdad”.
Cupp anunció que ya no era miembro del grupo a favor de los derechos de las armas porque “tener la razón ya no se sentía justificado”, y añadió que “debemos hacer algo con respecto a las armas”.
La periodista con trayectoria en temas políticos nacionales se pronunció a favor de medidas como la verificación universal de antecedentes, la prohibición de los grandes barriles de munición y el bloqueo de los abusadores domésticos o de los supremacistas blancos para que no tengan acceso a las armas de fuego.
“Estoy tan harta y cansada de participar en este ciclo predecible de la política, donde se produce un tiroteo masivo, que la izquierda pide nuevas leyes de armas -algunas significativas, otras improductivas-, la derecha grita ‘pendiente resbaladiza’ y se esconde detrás de la Constitución”, dijo. “No pasa nada, nada cambia. Y con el próximo tiroteo en masa, lo haremos todo de nuevo”.
La comentarista conservadora se emocionó al hablar del reciente tiroteo en El Paso, Texas, Walmart, que dejó huérfano a un bebé de dos meses cuando sus padres estaban entre las 22 personas asesinadas.
“Sé que se me acusará de dejar que mis emociones se interpongan en los hechos aquí. Ya he hecho esa acusación antes”, dijo Cupp con lágrimas en los ojos. “Pero esto es un problema emocional. ¿Cómo podría no serlo? De hecho, debería ser más emocional”.
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Pidió a sus amigos del Partido Republicano y del NRA que se unieran a ella.
“Empecemos con la emoción. Hay mucho que podemos lograr si empezamos como humanos, no como cabilderos de la NRA o cabilderos de control de armas. No como grupos de intereses especiales o políticos, sino como seres humanos”, dijo. “Mamás, papás, hermanos, hermanas, amigos, colegas. Porque tenemos todo que perder si no lo hacemos”.
El apasionado monólogo de la ex presentadora de HLN marca un cambio con respecto a su anterior crítica de cómo los presentadores de noticias por cable informaron sobre el tiroteo de Parkland, Florida, en la escuela secundaria en 2018.
“Si usted encendió las noticias por cable anoche y esta mañana, es seguro decir que no recibió la noticia”, dijo Cupp anteriormente. “Eso es porque, cuando se trata de armas, los presentadores se quitan los sombreros de periodista y se ponen los de activista.”