Gustavo Rízquez/El Sol Latino.- Con más de un centenar de casos en los Estados Unidos, el sarampión se transforma en una preocupación viral que resurge en América con afectación en al menos una decena de países más del continente.
Recientes informaciones apuntan a un fuerte resurgimiento en su zona endémica, Europa, pero el ascenso en el continente americano debe colocar a la familia en posición defensiva.
Para proteger a los integrantes del hogar y no representar un riesgo para la comunidad, las personas como primera medida preventiva tienen que inmunizarse.
Recomendaciones para proteger a la familia involucran las siguientes medidas:
- Tener las vacunas del calendario nacional al día: Una dosis de la triple viral al año de vida y una dosis al ingreso escolar.
- Vacunar a los niños de 6 a 11 meses de edad, sin que implique modificaciones en el esquema de vacunación posterior.
- Aplicar un refuerzo de vacuna a los niños de 1 a 15 años que no hayan recibido dos dosis en su oportunidad.
- Las personas de 16 a 50 años que no hayan recibido una dosis de vacuna en los últimos 5 años también deben recibirla.
- Es importante garantizar que los viajeros sean inmunes al sarampión antes de realizar viajes internacionales.
Cómo están las cosas en la actualidad
De acuerdo a la Organización Panamericana de la Salud, en América, hasta el 25 de agosto, se habían notificado 5 mil casos en 11 países. Los principales son Venezuela, con 3 mil 500, en donde además se ha restablecido la transmisión endémica, y Brasil, que ya tiene 1 mil 200 casos. En Estados Unidos se ha registrado más de un centenar.
De acuerdo a especialistas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) consultados sobre el caso, el brote de sarampión es epidémico sólo en Europa, en América hay presencia de la enfermedad en 11 países.
“El brote de sarampión en Europa se debe a la falta de vacunación”, dijo Jorge Baruch Díaz Ramírez, responsable de la Clínica de Atención Preventiva del Viajero (CAPV), institución fundada por la Facultad de Medicina adscrita a la UNAM.
“Este padecimiento es viral y altamente contagioso. En promedio nueve de cada 10 personas en contacto directo con alguien enfermo lo adquiere y es mortal debido a que tres de cada 10 que lo contraen mueren”.
Dijo además que tiene impacto en la calidad de vida porque de los siete que sobreviven, tres quedan con secuelas neurológicas incapacitantes y graves”
Una evaluación del sarampión en ultramar
Baruch Díaz refirió que más allá del Atlántico y el Pacífico, los 10 países con mayor incidencia de casos en los últimos 12 meses son, según la Organización Mundial de la Salud: India, Ucrania, Filipinas, Nigeria, Yemen, Serbia, Indonesia, China, Congo y Pakistán.
En tanto Guadalupe Soto, del Departamento de Salud Pública de la misma facultad, explicó que una de las hipótesis del repunte “se debe a la campaña desinformativa de activistas en Italia, para que los niños no sean inmunizados, con el argumento de que las secuelas son mayores; lo mismo sucede ya con enfermedades como la tos ferina y la difteria”.
Prevención de post-exposición
De acuerdo a información que ofrece la Clínica Mayo en su portal www.mayoclinic.org, el médico es quien puede diagnosticar sarampión sobre la base de la erupción cutánea característica de la enfermedad, y también por puntos blancos azulados con fondo rojo intenso (punto de Koplik) en la cara interna de la mejilla. Si es necesario, un análisis de sangre puede confirmar si la erupción cutánea es verdaderamente sarampión.
Tratamiento
Ningún tratamiento puede hacer desaparecer una infección por sarampión confirmada. Sin embargo, se pueden tomar algunas medidas para proteger a las personas vulnerables que hayan estado expuestas al virus.
Vacuna posterior a la exposición. Las personas no vacunadas, incluso los niños pequeños, pueden vacunarse contra el sarampión dentro de las 72 horas posteriores a la exposición al virus del sarampión para protegerse contra la enfermedad. Si el sarampión aun así se manifiesta, por lo general, tiene síntomas más leves y dura menos.
Concentrado de inmunoglobulinas. Las mujeres embarazadas, los niños pequeños y las personas con un sistema inmunitario debilitado que están expuestos al virus pueden recibir una inyección de proteínas (anticuerpos) llamada «concentrado de inmunoglobulinas». Cuando se administran dentro de los seis días posteriores a la exposición al virus, esos anticuerpos pueden prevenir el sarampión o aminorar la intensidad de los síntomas.
Medicamentos
Antifebriles. Tú o tu hijo también pueden tomar medicamentos de venta libre como paracetamol (Tylenol, otros), ibuprofeno (Advil, Motrin, otros) o naproxeno (Aleve) para ayudar a aliviar la fiebre que acompaña el sarampión.
Ten cuidado cuando les des aspirinas a los niños o a los adolescentes. Si bien la aspirina está aprobada para su uso en niños mayores de 3 años de edad, los niños y adolescentes que se recuperan de la varicela o de síntomas parecidos a la influenza nunca deben tomar aspirina. Esto es porque la aspirina ha sido asociada al síndrome de Reye, una enfermedad poco frecuente, que puede poner en riesgo la vida de esos niños.
Antibióticos. Si se contrae una infección bacteriana, como neumonía o una infección en el oído, mientras tú o tu hijo tienen sarampión, el médico podría recetar un antibiótico.
Vitamina A. Las personas con niveles bajos de vitamina A tienen más probabilidades de padecer un caso más grave de sarampión. La vitamina A puede disminuir la gravedad del sarampión. Generalmente, se administra como una dosis grande de 200.000 unidades internacionales (UI) durante dos días.