El presidente de Argentina, Alberto Fernández, considera que en ese país suramericano están dadas las condiciones para que el proyecto de ley para legalizar el aborto, que envió el 17 de noviembre al Congreso, sea aprobado y se convierta en ley.
El mandatario puntualizó que él es el primer abanderado de ese reclamo.
“Estamos en condiciones para que esto se convierta en ley, a diferencia con otros tiempos. El hecho que el Presidente del país envíe un proyecto de ley que reclame su tratamiento y aprobación, que se comprometa públicamente diciendo que esto es necesario para la salud pública argentina y para garantizar la salud de las mujeres y sus derechos, me parece que genera un escenario distinto”, afirmó en declaraciones a una estación de radio.
El Jefe de Estado de tendencia izquierdista, había anunciado en días anteriores el envío al Legislativo de un proyecto de ley orientado a legalizar la interrupción voluntaria del embarazo. De forma paralela también remitió otro proyecto que establece la creación de un programa para robustecer la atención integral de la salud en la mujer durante el embarazo.
“La criminalización del aborto de nada ha servido, solo ha permitido que los abortos ocurran clandestinamente en cifras preocupantes”, dijo en su momento el Presidente en un mensaje en video difundido a través de su cuenta oficial de Twitter.
Siempre fue mi compromiso que el Estado acompañe a todas las personas gestantes en sus proyectos de maternidad y cuide la vida y la salud de quienes deciden interrumpir su embarazo. El Estado no debe desentenderse de ninguna de estas realidades.#QueSeaLey pic.twitter.com/V7Lr6wBmuB
— Alberto Fernández (@alferdez) November 17, 2020
El el mensaje el mandatario lamentó que cada año se hospitalizan aproximadamente 38.000 mujeres por abortos mal practicados y 3.000 ha muerto por esa causa desde 1983.
Fernández dijo que espera contar con los votos necesarios en el Congreso para que no se repita lo acontecido en 2018, cuando la Cámara de Diputados aprobó un proyecto para regular el aborto y el Senado lo desechó.
El Presidente refirió que ya para los primeros días de marzo el proyecto de ley se encontraba muy avanzado, pero el 19 de marzo comenzó la situación derivada por la pandemia del coronavirus y el aislamiento y todo se paralizó.
Por tal situación Fernández decidió esperar para no adicionar más tensiones al sistema de salud argentino, aunque, según afirmó, “gran parte de los abortos hoy en día se producen por vía farmacológica y la atención de los hospitales (en estos casos) es notablemente reducida”.
“Lo que yo busqué fue que cediera un poco la tensión sanitaria para que, eventualmente si alguna mujer necesitaba del sistema sanitario no tuviera que estar en el medio del estrés de la pandemia”, explicó.
Pero ahora Fernández considera que es el momento oportuno porque han observado que desde hace 12 semanas en Buenos Aires y toda su área metropolitana, se ha observado una caída constante de la cifra de contagios de COVID-19. Por otra parte se deseo es que el Legislativo discuta el proyecto de ley antes de que termine el presente ejercicio.
Entre otros aspectos, el proyecto contempla que se permitirá el acceso a la interrupción del embarazo hasta la semana 14 de gestación. Más allá de ese plazo solo se permitirá si la mujer o ser gestante fue víctima de violación o si el embarazo haga peligrar la vida de la madre. Estos son los dos únicos supuestos por los que se permite abortar legalmente en Argentina actualmente.