El Daylight Saving Time (DST) comienza en Estados Unidos el segundo domingo de marzo, este año el domingo 9, a las 12: 00 am, con el adelanto de una hora en los relojes.
Este ajuste implica que las horas de luz se extienden durante la tarde y la noche, y hace que el primer domingo de noviembre, cuando se regresa al horario estándar, se retrasen los relojes una hora.
Durante los meses de verano, los días son más largos, lo que permite a los estadounidenses aprovechar la luz natural y reducir la necesidad de encender las luces.
El Daylight Saving Time u horario de verano ha sido un tema en el que el presidente Donald Trump aseguró que trabajará para poner fin, ya que según él, supone una carga financiera innecesaria para Estados Unidos.
“El Partido Republicano utilizará sus mejores esfuerzos para eliminar el horario de verano, que tiene un pequeño pero fuerte público, pero no debería. El horario de verano es inconveniente y muy costoso para nuestra nación”, enfatizó Trump en diciembre de 2024, antes de asumir su segundo mandato no consecutivo.
El horario de verano fue adoptado por el gobierno federal durante la Primera Guerra Mundial, pero fue impopular entre los agricultores y fue abolido rápidamente. Muchos estados experimentaron con sus propias versiones hasta que en 1967 se reintrodujo en todo el país.
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El Senado estadounidense presentó en 2022 un proyecto de ley que, al igual que el plan de Trump, pondría fin al cambio de hora dos veces al año, en favor de una nueva hora estándar permanente.
Pero la Ley de Protección de la Luz Solar proponía el cambio opuesto, quedar permanentemente al horario de verano en lugar de eliminarlo, para dar paso a tardes más luminosas y menos viajes a casa en la oscuridad para estudiantes y oficinistas.
El proyecto de ley nunca llegó al despacho del presidente Joe Biden, ya que no fue aprobado por la Cámara de Representantes.
El ajuste del horario no se realiza en Hawái, en la mayor parte de Arizona, en la Nación Navajo, en Samoa Americana, en Guam, en las Islas Marianas del Norte, en Puerto Rico ni en las Islas Vírgenes de Estados Unidos.
Con información de AFP