Dos policías uniformados recibieron disparos en Newark, la ciudad más grande de Nueva Jersey, cuando respondían a una llamada al 911 sobre un hombre buscado por un tiroteo no relacionado en la misma zona la semana pasada.
Los oficiales que pertenecen al Departamento de Policía de Newark, recibieron disparos a quemarropa en un estacionamiento detrás de un edificio de apartamentos en una calle tranquila. Un oficial dijo que uno de los heridos recibió un disparo en la pierna y el otro en el hombro, y que ninguna de sus heridas era potencialmente mortal.
Las autoridades identificaron al presunto tirador como Kendall Howard, de 30 años, de East Orange, Nueva Jersey. El pistolero permaneció prófugo el día del tiroteo.
Fuerzas del orden público federales, estatales y locales rodearon un edificio residencial en el área durante varias horas mientras los agentes realizaban registros de puerta en puerta en sus apartamentos en busca del atacante.
«En algún momento debe haber salido del edificio», dijo Fritz G. Fragé, director de seguridad pública de la ciudad, en la conferencia.
El alcalde de Newark, Ras J. Baraka dio también declaraciones sobre el suceso. «Cuando salían del edificio, probablemente él estaba entrando al edificio», dijo el alcalde. También aseguró que los oficiales recibieron disparos «a quemarropa», pero que ambos estaban en condición estable. Baraka confirmó la versión de que los oficiales atendían una llamada del 911 en la zona.
Por su parte, el gobernador de Nueva Jersey, Phil Murphy indicó que se encuentra en contacto con las autoridades del Estado para proporcionar los recursos necesarios. «Estoy al tanto y estoy monitoreando de cerca una situación que se está desarrollando en Newark. Estoy en contacto con las autoridades locales y el Estado está proporcionando los recursos solicitados. Continuaremos apoyando a las fuerzas del orden locales y nos aseguraremos de que todos los residentes estén seguros».
I am aware of and closely monitoring an unfolding situation in Newark.
I am in touch with local authorities and the State is providing resources as requested. We will continue to support local law enforcement and ensure that all residents are safe.
— Governor Phil Murphy (@GovMurphy) November 1, 2022
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Funcionarios acordonaron varias cuadras de Chancellor Avenue y los vehículos de emergencia invadieron la escena. Varios helicópteros sobrevolaban el lugar. Igualmente usaron una grúa estilo militar por la calle.
Según los testimonios recogidos por los medios de comunicación locales, muchos vecinos estaban anonadados por lo ocurrido, pero especialmente por la cantidad de fuerza y elementos que llegaron al lugar a apoyar a los funcionarios.
🚨 OFFICERS DOWN: Please pray for the 2 police officers in Newark, New Jersey who were shot. Reports indicate the Shooter is using a rifle and is actively shooting at law enforcement.
*This is developing* pic.twitter.com/0msEtGrdYK
— National Fraternal Order of Police (FOP) (@GLFOP) November 1, 2022
Cada vez más disparos
El tiroteo ocurre en medio de una escalada violenta en todo el país, donde el uso de armas de fuego ha ido en aumento. «Este nivel de violencia debe ser detenido y condenado por todos», dijo en Twitter Patrick Colligan, presidente de la Asociación Benéfica de Policías del Estado de Nueva Jersey, un sindicato que representa a más de 33,000 agentes de la ley.
Según datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU (CDC por sus siglas en inglés) Texas es el estado que tiene más muertes por armas de fuego, y con un amplio margen, que cualquier otro estado, es una tasa de 14,2 muertes por cada 100.000 habitantes. California, en comparación, registró 3.449 muertes: una tasa de muertes por armas de fuego de 8,5.
Aún así Nueva Jersey está al fondo de la lista. Tiene una tasa de 5 por cada 100 mil habitantes, pese a que 8% de la población posee un arma de fuego.
Pero la mayoría de las muertes por armas de fuego no involucran un tiroteo masivo: son suicidios. En 2020, el 54% de las muertes por armas de fuego en EE.UU. fueron suicidios.