Las agencias estatales de New Jersey ajustan estrategias para contratar a trabajadores con discapacidades en cumplimiento de una nueva ley firmada por el gobernador Phil Murphy la semana pasada.
La nueva ley exige a la División de Igualdad de Oportunidades en el Empleo y Acción Afirmativa y a la Comisión de Servicio Civil del estado que desarrollen un programa para aumentar la sensibilización sobre oportunidades de empleo para las personas con discapacidad.
“Todos los habitantes de Nueva Jersey merecen la igualdad de acceso a los apoyos y oportunidades de la comunidad”, declaró el gobernador Murphy en la website oficial del estado.
Destacó el gobernador el impulso que este grupo laboral puede dar a la economía. “Estas medidas esenciales reconocen las importantes contribuciones que los individuos con discapacidades proporcionan a nuestra economía, ampliarán el acceso a la formación y a las nuevas oportunidades de empleo, y tendrán un impacto positivo en las vidas de muchos de nuestros residentes.”
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La nueva iniciativa, denominada “El Estado como empleador modelo de personas con discapacidad”, o SAME, fue patrocinada por la senadora estatal Holly Schepisi. “La inspiración provino realmente en mis propias experiencias al crecer y ver a un ser querido luchar por sí mismo”, dijo Schepisi.
Según la ley, el programa SAME tendrá que encontrar formas de “eliminar las barreras en el proceso de solicitud y contratación, y crear mecanismos para aumentar las tasas de retención” de las personas con discapacidades empleadas por el estado.
“Creo que es realmente importante para nosotros, como estado, reconocer que se trata de una población desatendida y ofrecer oportunidades y formación laboral y avances a nuestros residentes más vulnerables”, dijo Schepisi para un reportaje de WHYY.
Situación agravada por la COVID-19
Javier Robles, quien preside el Comité de Acción COVID-19 de Discapacidades de Nueva Jersey sostiene que la situación laboral de las personas con discapacidades se agravó por la pandemia de coronavirus.
Por ejemplo, muchas personas ya no podían recibir asistencia para el cuidado personal porque “no querían salir de casa” o tenían “miedo de tener a alguien en su casa”, dijo. Robles dijo que la gente también tuvo problemas para utilizar los beneficios emitidos por el gobierno.
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La nueva ley también requeriría que el Estado estableciera un programa de reclutamiento y derivación con colegios y universidades. Robles dijo que el programa también podría considerar la posibilidad de asociarse con las escuelas secundarias.
“Las personas con discapacidades no se gradúan al mismo ritmo que las personas que no tienen discapacidades, y sabemos que la educación desempeña un papel importante a la hora de conseguir o no un empleo”, afirmó Robles.
Casi el 10% de las personas de Nueva Jersey viven con una discapacidad.
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