Ciertas señales, como las medidas tomadas por la Asamblea General para explorar más sobre la posibilidad de legalizar la marihuana recreacional mediante audiencias públicas en los comités del Senado parecen indicar que Pensilvania se unirá a los estados vecinos para colocar el mercado del cannabis en un marco legal.
El tema ha estado rondando los ámbitos políticos en el estado. El gobernador Tom Wolf y el vicegobernador John Fetterman se han unido a los llamamientos de los legisladores demócratas para que la Asamblea General considere propuestas para el uso legal de la marihuana.
Sin embargo, dos factores notorios estarían creando las condiciones necesarias para legalizar el cannabis. Por una parte, los legisladores republicanos han sostenido conversaciones serias sobre propuestas al respecto. A esto se le añade los beneficios fiscales que los estados vecinos reciben gracias a un mercado regulado.
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La apreciación del senador estatal Sharif Street, demócrata de Filadelfia señala que el proceso es solo una cuestión de tiempo. “Creo que hay un sentimiento creciente en la Asamblea General de Pensilvania de que no se trata de si legalizamos el cannabis, sino de cuándo”, declaró para PA Capital-Star.
Street, junto con el senador estatal Dan Laughlin, republicano del condado de Erie, presentó el año pasado el proyecto de ley 473 que consiste en una propuesta de legalización de la marihuana para adultos.
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Marco para legalizar
El proyecto exige un “marco racional” para la legalizar el cannabis. Mediante su implantación los adultos mayores de 21 años podrían comprar y poseer 30 gramos de cannabis y los pacientes médicos podrían cultivar hasta cinco plantas en casa para uso personal.
El marco legal igualmente establecería regulaciones sobre su consumo en relación al desempeño laboral y la intoxicación. Trabajaría en la creación de licencias de equidad y la eliminación de los antecedentes penales para cualquier persona con una condena no violenta por consumo de cannabis. La propuesta incluye la prohibición de comercialización del producto a menores de edad.
The legal marijuana entering Pennsylvania will be coming from New Jersey an New York.
The revenue, jobs, and investments, leaving Pennsylvania will be going to New Jersey and New York.
Makes sense. 💡
For New Jersey and New York. https://t.co/kvjMQgTz4x
— John Fetterman (@JohnFetterman) December 17, 2019
También el senador estatal Mike Regan, presidente de la Comisión de Derecho y Justicia del Senado, ha encabezado el proceso de audiencias mientras se prepara para presentar su propio proyecto de ley de legalización bipartidista.
Pero a pesar de estar a la zaga, Pensilvania posee la ventaja de aprender de la experiencia de otros estados en el desarrollo de sus mercados de cannabis. Después de todo, se trata de un complicado proceso que envuelve diversas direcciones y que requiere consideraciones bien planificadas.
Temas por debatir
Bajo esta perspectiva, los legisladores deben considerar no sólo las complejas cuestiones relacionadas con el desarrollo de un nuevo marco regulador, sino también las mejores opciones políticas que tengan en cuenta la salud, la seguridad pública y la equidad.
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Más allá de las cuestiones reglamentarias, existe una serie de temas relacionados con la aplicación de la ley pendientes de abordar. Entre ellas, la preocupación por la conducción bajo los efectos de la marihuana y la posibilidad de comprobar si alguien está intoxicado, los derechos de la Segunda Enmienda de las personas en relación con las leyes federales sobre sustancias controladas y el destino de los posibles ingresos.
Con la Asamblea General todavía sopesando sus opciones de regulación, las propuestas de Street y Laughlin pueden ser el punto de partida del debate.