El papa Francisco, quien mostraba evidentes síntomas de resfriado este miércoles 26 de febrero, canceló este jueves su presencia en una misa por una “ligera indisposición”, informó la Santa Sede.
El Sumo Pontífice de 83 años, no asistió a la misa programada en la basílica de San Juan de Letrán de Roma este jueves en la mañana.
“Debido a una ligera indisposición, prefirió quedarse cerca a la residencia Santa Marta donde se aloja en el Vaticano”, aseguró el director de la sala de prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, en un comunicado.
La misma fuente precisó que las otras actividades de la jornada fueron confirmadas.
El pontífice argentino, que tiene problemas para caminar por molestias en la cadera, rara vez cancela una cita de su apretada agenda.
El miércoles, que en general es una jornada muy cargada, estaba resfriado y con frecuencia tosía y se sonaba la nariz durante la audiencia general organizada al aire libre en la plaza de San Pedro y durante la cual apretó las manos a decenas de fieles y manifestó su cercanía a los contagiados con el coronavirus COVID-19 en todo el mundo.
En la tarde, participó en la tradicional procesión de los miércoles de Ceniza en la basílica de Santa Sabina en Roma y cumplió el rito de la imposición de la cruz de ceniza en la frente, gesto que marca el inicio de la Cuaresma, tiempo de oración y de reflexión para los católicos.
Italia registra 17 fallecidos por coronavirus
Diecisiete personas han muerto en Italia por el coronavirus COVID-19 que afecta especialmente al norte del país, y el número de contagiados asciende a 650, informó este jueves el jefe de la Protección Civil, Angelo Borrelli.
Indicó que tres pacientes en Lombardía (norte), la región más golpeada, han recibido el alta porque se han curado, por lo que las personas que se han recuperado ya de esta enfermedad ascienden a las 43 en todo el país.
El jefe de Protección Civil también descartó que sea crítica la situación en los 11 municipios afectados de Lombardía y Véneto, los de la llamada “zona roja”, e hizo un llamamiento a la calma porque la mayoría de los infectados se encuentran en aislamiento domiciliario, sin necesidad de ingresar en un hospital.
Ante este brote de coronavirus en Italia, Protección Civil está empleando a más de 770 personas para gestionar la emergencia y también cuenta con 800 voluntarios.