El supuesto suicidio de un niño en Miami, que al parecer apagó su vida con la práctica del “reto de Momo” en Youtube, es una nota que recorre Internet, con un sospechoso recato que evita dar nombres y precisiones en torno al suceso, hecho que coloca un matiz de desinformación.
Ninguna autoridad del estado de Florida se ha pronunciado para dar veracidad, dimensión y profundidad institucional a la especie que circula en los medios de comunicación y que esparce alarma en el seno de las familias floridanas.
Los diversos portales que se han hecho eco de este supuesto hecho de sangre, se han limitado a decir que la tragedia enlutó a un hogar hispano de North Miami Beach donde un niño de 11 años acabó con su vida en su propia habitación.
Sobre el particular también se ha destacado que YouTube, afirmó el mes pasado que no ha visto “evidencia reciente de videos que promuevan el Reto Momo en YouTube”.
La prestigiosa cadena Telemundo elaboró una nota de prensa en la que tomó testimonio de la madre y el padre de niño que supuestamente se suicidó tras seguir las instrucciones del reto. Para la elaboración del reporte acudió a la reserva de las identidades “por respeto al dolor de la familia”.
El padre del difunto lanzó un mensaje de prevención para que un desenlace como el que acabó con la vida de su pequeño no se vuelva a repetir.
Los presentadores de la cadena televisiva dijeron que “el reto de Momo” no tiene nada de gracioso, “es un juego malévolo que envuelve a miles de niños y adolescentes alrededor del mundo y que, por desgracia, ya cobró su primera víctima en Miami”.
El reportero Guillermo González fue el encargado de construir la historia que precisa que el niño empezó a actuar de manera extraña en algunas ocasiones, de acuerdo a testimonio dado en cámara por sus padres.
El plano de las tomas de televisión evitó el rostro de los entrevistados, quienes expusieron que el niño “varias veces hizo referencia a la muñeca de apariencia diabólica que poco a poco se va apoderando de la mente y el corazón de los niños que entran en su malévolo juego”.
De acuerdo al citado medio informativo, la familia originaria de Perú, está devastada “pero aún así el padre del niño que murió quiere transmitir un mensaje a todos los padres de familia sobre la gravedad de estos videos”.
Aunque sabe que nada le devolverá la vida de su hijo, su terrible experiencia debe servir de ejemplo a miles de familias para que hagan lo que esté a su alcance por evitar tragedias como ésta.
Hasta el momento ninguna autoridad local o federal ha entregado resultados de las investigaciones que se adelantan para detectar a los autores de estas cadenas irresponsables de videos virales en las redes sociales. Muchos esperan que cuando se sepan no sea demasiado tarde.
Una búsqueda independiente para hallar el video que lanza el reto de Momo en Youtube arrojó cero resultados, la mayoría de los contenidos pertenecen a cadenas informativas y youtuber que hablan acerca del “reto”, pero el reto no aparece tal cual como señalaron los ejecutivos de Youtube en su oportunidad.
Los medios de comunicación tienen que ser muy cuidadosos con la difusión de este tipo de informaciones, porque al estar carentes de datos oficiales, experticias de autoridades judiciales y de investigaciones de entidades competentes, la propagación de historias “huecas” podrían ser un impulso al supuesto reto y no una ayuda para su erradicación.