La Escuela de Medicina Miller de la Universidad de Miami (UM), está en la búsqueda de aproximadamente 1.000 voluntarios adultos sanos en el sur de Florida para participar en un ensayo de vacunas contra la enfermedad COVID-19 que produce el nuevo coronavirus, y que está siendo desarrollada por la farmacéutica estadounidense Moderna, con sede en Massachusetts, en colaboración con el Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas.
Según un comunicado distribuido por la Universidad, se trata del primer ensayo clínico de Fase 3 que realizará la Red de Ensayos de Prevención COVID-19 de los Institutos Nacionales de Salud de Estados Unidos, para el que ha sido seleccionada la Escuela de Medicina Miller.
El objetivo es probar la vacuna desarrollada por los científicos del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, perteneciente a los Institutos Nacionales de Salud junto a sus colaboradores de la empresa de biotecnología Moderna, detalla el comunicado.
La escuela Miller planea comenzar el estudio este verano con los voluntarios del sur de Florida, que deberán tener 18 años o más y pueden registrarse en la en la web coronaviruspreventionnetwork.org. para participar.
“Estamos comprometidos a involucrar a las personas que representan el rango de residentes afectados por COVID-19 en el sur de Florida por género, edad, raza y etnia, así como a aquellos que están particularmente en riesgo debido a afecciones médicas”, dijo Susanne Doblecki-Lewis, experta en enfermedades infecciosas y directora del proyecto.
“La pandemia de COVID-19 está teniendo un tremendo impacto en el sur de Florida y en todo el mundo, por lo que estamos probando vacunas con el objetivo de encontrar una forma segura y efectiva de detener la propagación del virus“, añadió la especialista.
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De acuerdo con el comunicado, la Escuela de Medicina Miller es un importante centro de investigación de enfermedades infecciosas, particularmente del VIH y el SIDA, cuya afiliación con la Red de Ensayos de Vacunas contra el VIH la convirtió en un lugar natural para analizar las vacunas contra la COVID-19.
De resultar efectiva, Moderna pretende producir entre 500 y 1.000 millones de dosis de la vacuna inyectable, cuyo nombre es ARNm-1273 contra la COVID-19. Los primeros ensayos ya han arrojado resultados satisfactorios en la primera fase de pruebas clínicas y podría estar lista para 2021 si supera esta última etapa y hay luz verde para su distribución.
Moderna asegura que una vez superen las tres fases de pruebas clínicas y obtengan la aprobación regulatoria podrán producir dosis desde sus laboratorios asociados en Estados Unidos y España para abastecer los principales mercados globales.
La Fase 3 y definitiva para conocer si la vacuna de Moderna obtendrá aprobación para ser distribuida, comenzará el 27 de julio con 30.000 voluntarios elegidos aleatoriamente, pero vinculados a regiones donde el nuevo coronavirus ha golpeado con más fuerza.
La razón de que Florida sea el enclave escogido para reclutar un último gran grupo de voluntarios es que es uno de los estados más castigados de Estados Unidos, con más de 316.000 casos confirmados y más de 4.700 muertos por la COVID-19.