La Oficina de Asunto Migratorios que el gobierno de los Estados Unidos tenía dispuesta en La Habana, dejó de funcionar, y los cubanos que requieran de cualquier diligencia consular tendrá que trasladarse hasta Ciudad de México desde donde se tramitarán visado y otros permisos.
Se trata del cierre permanente de esa parte de la sede diplomática estadounidense en La Habana que dejó sin esperanzas de contacto directo.
No obstante la mayoría de visados desde la embajada estadounidense en la capital de Cuba ya habían sido suspendidos desde noviembre de 2017, debido a la reducción de personal que siguió a los supuestos ataques contra la salud de 26 empleados esa delegación diplomática.
El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de EE.UU. (USCIS, por sus sigla en inglés) informó en torno al cierre definitivo de sus instalaciones en su web.
La oficina del USCIS en Ciudad de México asumirá la jurisdicción para los asuntos migratorios de los individuos que están en Cuba.
Sin embargo trascendió que algunos de los trámites serán realizados por el personal diplomático de la embajada estadounidense en La Habana.
Las relaciones entre Washington y La Habana se tornaron “distintas” desde que la administración Trump llegó a la Casa Blanca.
Sin embargo, se deterioraron aún más debido a “ataques” que sufrieron diplomáticos estadounidenses en Cuba entre noviembre de 2016 y agosto de 2017, unos enigmáticos incidentes que enfermaron al personal estadounidense en la isla y cuya causa aún sigue siendo investigada.
Washington ha acusado a Cuba de saber quién perpetró los supuestos ataques y de no haber protegido a su personal adecuadamente, algo que niega el Ejecutivo cubano.
Debido a este episodio, EE.UU. ordenó la salida del personal no esencial de su delegación en Cuba, es decir, un 60% del total.