La cultura, y aquí se incluye la gastronomía, es una evolución de muchas aristas: sociedad, entornos y costumbres. Los fenómenos migratorios mueven personas de un lado a otro, pero esas personas llevan consigo parte de sus tradiciones arraigadas, así evolucionan los sabores de los países, precisamente gracias a los migrantes.
Por ejemplo, según Google Arts & Culture, «el arribo de inmigrantes provenientes de toda Europa y el Medio Oriente, sobre todo los que llegaron a fines del XIX y principios del XX, redefinieron el perfil culinario de la Argentina. Los de origen italiano legaron los buenos usos de la harina y ayudaron a mitigar las privaciones a base de pastas y pizzas moldeadas bajo nuevos parámetros».
La colonización de América supuso la adición de algunas tradiciones ibéricas a la gastronomía en los pueblos originarios. «Los alimentos que los españoles trajeron en sus navíos desde Europa -cerdos, vacas, vino, trigo, aceite de oliva, especias- se fusionaron con los ingredientes y las técnicas de los nativos para formar una cocina mestiza que fue incluso mejorada por los esclavos africanos y los inmigrantes de Asia y Europa Central», señaló BBC Mundo.

Y los mismos procesos migratorios posteriores, dieron las cocinas que hoy conocemos en Latinoamérica.
El mismo fenómeno ocurrió en Estados Unidos, en este caso particular se sigue desarrollando. Pero algo muy curioso, es el nacimiento de la comida TexMex, un fenómeno netamente migratorio que hoy en día tiene su propio movimiento.
La gastronomía TexMex hace referencia a las recetas de los residentes mexicanos en Texas. Es una fusión de ambas culturas gastronómicas.
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El origen se remonta a los primeros migrantes mexicanos que llegaron a Estados Unidos. Las personas se asentaron en la zona de Texas junto a españoles que aun estaban en la zona.
Sabores latinos en Estados Unidos
«La cocina es uno de los primeros marcadores étnicos en ser absorbidos por las comunidades locales», aseguraron a CNN Cristiana Díaz y Peter Ore, investigadores de la Escuela de Sociología en la Escuela de Ciencias Sociales y de Comportamiento de la Universidad de Arizona, que publicaron un estudio sobre la influencia de la comida hispana y asiática en Estados Unidos.
En su investigación intentan demostrar cómo se ha cambiado el tejido social cultural estadounidense a través de la inmigración.
Los tacos, el ceviche, las arepas, el churrasco y las empanadas, son solo algunos ejemplos de los platos latinos muy populares en EE. UU.
Añoranza por la gastronomía
La gastronomía es un símbolo de identidad nacional que produce orgullo. Los aromas y sabores desencadenan recuerdos. La cocina tradicional otorga sentimientos de alegría y nostalgia, especialmente para quienes están lejos de sus fronteras.
El vivir en el extranjero tiene un gran impacto en la forma en la que se valora la gastronomía nacional. Para recordar, los inmigrantes deben adaptar los ingredientes a su disposición para conseguir un acercamiento a sus sabores indexados.