La Primera Dama, Jill Biden visitó California esta semana, se reunió con los trabajadores agrícolas y apoyó los esfuerzos de vacunación contra COVID.
En el vuelo de regreso a Washington, DC, los miembros de la prensa y el personal de Jill Biden fueron invitados a las barras de helado Dove durante el servicio de comidas. Una azafata vestida de negro con cabello negro corto y una máscara negra repartió las barras. Su etiqueta con su nombre decía «Jasmine».
Poco sabían los pasajeros que el cabello era una peluca, el nombre era mentira, y no reconocieron el hecho de que la propia Jill Biden les había entregado sus delicias congeladas. Unos minutos después de repartir las barras, Biden se quitó la peluca, se rió y dijo: «¡April Fool’s!».
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Biden creció en una familia de bromistas que se deleitaban con el Día de los Inocentes, como se le conoce en Hispanoamérica, por lo que lo hace de forma natural. El propio Joe Biden ha comentado sobre la celebración tradicional de la festividad de su esposa. En una entrevista de 2014 con Rachel Ray, Biden confesó que era una fecha que le preocupaba. «Lo que me preocupa cuando me despierto el Día de los Inocentes es: ‘¿Qué diablos va a hacer Jill esta vez?’ Crees que estoy bromeando. No estoy bromeando». Así que no es la primera vez.
Una vez, durante el primer mandato de su esposo como vicepresidente de Obama, se metió en un techo antes de un vuelo en Air Force Two, sorprendiendo a la primera persona en abrir el contenedor para guardar su equipaje. Biden escribió sobre esa broma en sus memorias de 2019.
«Llegué temprano a Joint Base Andrews, venía directamente de dar mis clases, y fui la primera en llegar», escribió. «Cuando abordé el Air Force Two, miré a mi alrededor y tuve una idea. Los compartimentos superiores eran pequeños, pero sabía que, si me arrugaba lo suficiente, podría meterme en uno».
Con la ayuda de una silla, una mesa y un ayudante naval, así como algunas clases de barra de ballet, hizo precisamente eso.
«Cuando la primera persona abrió el contenedor para guardar su bolsa con ruedas, salí a la mitad y grité, ‘¡Boo!’ – aunque fue difícil sacarlo a través de mi risa», escribió Biden.