Eldric Sella es un caraqueño de 24 años. En el 2018, como otros más de cinco millones de venezolanos, huyó de su país por distintas razones. Fue invitado a una competencia de boxeo, su especialidad en Trinidad y Tobago. Se quedó. Trabajaba medio tiempo en lo que podía y a su vez, seguía entrenando con su papá. Este año cumplió un sueño: ir a Tokio a los Juegos Olímpicos, no bajo la bandera del país que lo vio nacer, sino bajo la bandera del equipo de refugiados.
A los 18 años, Eldric obtuvo un lugar en la selección nacional de Venezuela. Formó parte del equipo durante siete meses, hasta que él y los otros miembros más nuevos fueron despedidos por falta de recursos. Una realidad que se extiende en otras disciplinas deportivas en el país caribeño.
«No hubo un día en el que no pensara en ir a los Juegos Olímpicos… en el que no pensara en el boxeo», dijo Eldric según un trabajo especial de la Agencia de la ONU para los Refugiados. «Cuando estaba mezclando concreto, estaba pensando en cómo eso me ayudaría en mi carrera de boxeo. Cuando estaba cortando césped, también pensaba en cómo eso me ayudaría en el boxeo. Cuando estaba pintando una casa, o lo que sea que estuviera haciendo, siempre tenía en mente lo que quería hacer».
Actualmente se estima que 24.000 personas refugiadas y migrantes venezolanas viven en Trinidad y Tobago, algunas llegan al país después de haber realizado el peligroso viaje marítimo a través del Canal de Colón, que separa a las dos naciones. Venezuela ocupa el segundo lugar en el mundo de personas desplazadas, después de Siria.
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Sella acabó dolorosamente noqueado en menos de dos minutos, por un knock-out técnico del experimentado dominicano Euri Cedeno Martinez, lo que puso fin a su escalada al Olimpo. Poco después una periodista venezolana-colombiana le pidió un mensaje de una palabra para su país y él solo respondió: «Disculpa».
Sella tuvo su primer éxito en el boxeo al ganar la medalla de plata en el Campeonato de Boxeo de la Asociación de Boxeo de Trinidad y Tobago en 2019, y fue este triunfo el que lo encaminó a ser parte del equipo olímpico de refugiados.
Hoy en día, es uno de los más de 50 atletas beneficiados con la beca de Atletas Refugiados que otorga el Comité Olímpico Internacional.
Ahora Eldric Sella no puede regresar a Trinidad y Tobago, contó su padre, Edward Sella, en entrevista con el periodista Sergio Novelli, en VPItv. «Trinidad y Tobago negó la posibilidad de entrar al país. No puede regresar», indicó.
«Nuestros pasaportes se vencieron y ha sido complicada la renovación. Y el Gobierno de Trinidad dice que no tiene un documento válido para otorgarle la visa», explicó.
Para viajar a Tokio, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados logró tramitarle una visa que le permitiera hacer el tránsito por Estados Unidos hacia Japón, a pesar de tener el pasaporte vencido.
Su padre también explicó que Acnur está haciendo las gestiones para encontrar un país que acepte a Eldric y eventualmente a su novia y a él.
“Trinidad y Tobago negó la posibilidad de entrar al país. Nuestros pasaportes se vencieron y ha sido complicada la renovación", explicó el padre del boxeador y refugiado venezolano Eldric Sella, quien informó que ACNUR busca un país donde pueda vivir https://t.co/SQQoMznK2N pic.twitter.com/tWotn1DJ3a
— Monitoreamos (@monitoreamos) July 26, 2021