Es un hecho verificable el ranking de denuncias por mala conducta y los cientos de miles de dólares que le cuesta a la ciudad reparar las acciones de un funcionario policial que genera violencia innecesaria en medio de un proceso de arresto que debería ser rutinario.
Sobre estos parámetros es que resalta el nombre del oficial de policía David Dohan, un uniformado quien no solo tiene un récord negativo por procedimientos inapropiados y violentos, sino que le ha costado a la ciudad varios miles de dólares en reparación para con sus víctimas.
Sin embargo, causa aún más extrañeza que el nombre del “elemento” siga apareciendo en querellas contra la policía sin que el Departamento de Policía de Filadelfia o alguna autoridad den fin a la carrera de “infracciones” en las que ha estado involucrado este policía.
David Dohan en otro libelo
De acuerdo a datos recogidos en el Pennsylvania Record, en reportaje amplio escrito por Nicholas Malfitano, un hombre de la localidad dice que fue víctima de la fuerza excesiva de un par de policías de Filadelfia, quienes lo dejaron con cuatro dientes perdidos y otras lesiones después de que supuestamente se saltó un semáforo en rojo en una intersección del noroeste de Filadelfia.
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La narrativa periodística precisa que la Corte de Distrito del Este de Pensilvania recibió la denuncia de quien se presenta como la víctima, Jamil Boyd, quien entabló una querella contra la ciudad de Filadelfia el 4 de agosto. En el libelo de la demanda aparecen los nombres de los oficiales David Dohan, Thomas LaCorte y John Does.
Según se transcribe de la demanda “el 17 de agosto de 2018, el demandante conducía un vehículo que iba hacia el norte por la avenida Germantown, con su perro Chihuahua en el asiento trasero. Aproximadamente a las 7:19 p.m., los demandados alegan que el demandante ignoró una señal roja constante en la concurrida intersección de las avenidas Germantown y Chelten”.
“Hay una cámara en esta intersección, pero los demandados no recuperaron el material de vídeo. Los policías acusados Doohan y Lacorte activaron su sirena de policía y detuvieron el vehículo del demandante en el 6001 de la avenida Germantown”.
Una vez que los oficiales se enteraron del nombre de Boyd, le informaron al demandante que estaba operando su vehículo con la licencia suspendida, que estaba en estado de “buscado” fuera de los condados de Delaware y Montgomery y le ordenaron salir del vehículo. Boyd cumplió las órdenes de los acusados, y puso las manos sobre el techo de su vehículo, con los acusados directamente detrás de él.
“El demandante giró la cabeza para mirar detrás del acusado Dohan y preguntó: ¿Por qué me arresta, oficial?” Sin provocación, el acusado Dohan agarró al demandante por la camisa y le dio un puñetazo con el puño cerrado en la boca. El demandado Dohan empujó al demandante al suelo, causando que cayera de cara primero, golpeando su labio superior en el adoquín y la acera de hormigón”, según la demanda.
Una golpiza en la escena
“Los demandados alegan que el demandante cayó al suelo porque se tropezó con el bordillo. La avenida Germantown es una calle histórica, y la acera de hormigón es empedrada con una acera alta de 12 pulgadas. Mientras el demandante estaba tumbado boca abajo en el suelo, ambos demandados saltaron inmediatamente encima de él. Ambos demandados golpearon al demandante en la cara y la boca varias veces durante varios minutos sin intentar esposarle o sujetarle mientras estaba tumbado encima de él”.
Boyd dice que nunca se resistió físicamente o golpeó a los acusados, y que los acusados nunca alegaron que sufrieron ninguna lesión física. Además, los acusados golpearon al demandante por detrás mientras estaba en el suelo, y luego le pusieron las esposas.
Tres oficiales y un detenido
“El demandante fue llevado al Hospital Einstein, para un tratamiento de emergencia en su cara, boca y disparo de táser. Ambos demandados utilizaron una fuerza excesiva durante el arresto, lo que causó graves lesiones que obligaron a hospitalizar al demandante. Sus lesiones incluyeron múltiples fracturas dentales que resultaron en la pérdida de 4 dientes, 14 puntos de sutura en el labio y múltiples abrasiones en las extremidades”, dice la demanda.
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“Los demandados primero le sacaron los dos dientes frontales superiores. Una cirugía posterior requirió la extracción de los dos dientes frontales inferiores del demandante. Los demandados también causaron laceraciones en los hombros, espalda y piernas del demandante”.
Boyd señaló un análisis de agosto de 2018 de las quejas contra los agentes de policía de Filadelfia, que mostró que el acusado Dohan tiene una de las tasas más altas de quejas de los ciudadanos contra los agentes de policía que cualquier otro agente del departamento.
El récord de Dohan
“A partir de agosto de 2018, el mismo mes en que el demandante fue arrestado, el demandado Dohan tuvo 19 quejas desde 2013, con un promedio de cuatro quejas al año. Cabe señalar que, en promedio, es inusual que un oficial de policía de Filadelfia reciba más de una queja al año”, dice la demanda.
Boyd agrega que una queja similar que involucra a Dohan y una conducta similar de fuerza excesiva ilegal fue resuelta el 16 de diciembre de 2017 por la suma de $110,000. Ocho meses después, el acusado Dohan agredió a Boyd.
Crueldad con animales
“Además, los demandados, Dohan y LaCorte robaron el perro Chihuahua del demandante del asiento trasero del vehículo cuando el demandante estaba en custodia, y colocaron el perro en el refugio de animales más cercano sin el permiso del demandante. Desafortunadamente, el demandante nunca encontró a su perro Chihuahua debido al comportamiento engañoso de los demandados”.
“El papeleo del refugio de animales revela que los demandados dejaron el perro Chihuahua del demandante una hora más tarde el mismo día a las 8:27pm, en el Equipo de Control y Cuidado de Animales de Filadelfia, ubicado en 111 W. Hunting Park Avenue. Los demandados declararon falsamente en el papeleo de la descarga que “a su leal saber y entender, este es un animal perdido o sin dueño”.
Boyd nunca pudo recuperar a su perro y afirma que también se enfrenta a cargos criminales supuestamente fabricados en su contra.
Y surgió el olor a cannabis
“Después de que el demandante estuvo bajo custodia, los acusados declararon que por primera vez, ahora olían un fuerte olor a marihuana que emanaba del vehículo, y se recuperaron de encima del asiento del pasajero delantero debajo de la bolsa había varios narcóticos y un arma de fuego cargada. El caso penal está actualmente pendiente de ser juzgado por un jurado el 1 de febrero de 2021 en el Tribunal del Condado de Filadelfia de Peticiones Comunes”, dice la demanda.
Por los cargos de enjuiciamiento malicioso, arresto ilegal, fuerza excesiva y responsabilidad bajo la ley Monell, la demandante solicita daños y perjuicios por lesiones personales; daños compensatorios por la privación de derechos constitucionales, daños a la reputación, angustia mental y emocional, dolor y sufrimiento, pérdida económica, privación de su libertad e intereses de propiedad; daños punitivos; honorarios de abogados; costos de la demanda; intereses, daños por demora y cualquier otra reparación que este Tribunal considere justa y equitativa.
El demandante está representado por Graham F. Baird del bufete de abogados de Eric A. Shore, en Filadelfia. Los acusados aún no han obtenido asesoramiento jurídico. Tribunal de Distrito de EE.UU. para el Distrito Este de Pennsylvania caso 2:20-cv-03777