La Guardia Costera de Estados Unidos suspendió la búsqueda de los 10 migrantes cubanos que desaparecieron el pasado miércoles 26 de mayo a unas 16 millas marinas al sur de Cayo Hueso en el sur de Florida. Estas personas junto con otras 10 a bordo de un bote naufragaron luego que la su embarcación se volteó.
La búsqueda cesó la noche del pasado sábado 29 de mayo. Los funcionarios no pudieron localizar ninguno de los cuerpos de los inmigrantes después de que el jueves de la semana pasada una patrulla marítima de la Guardia Costera encontrara los cadáveres de otros dos de los migrantes cubanos, informaron mediante un comunicado las autoridades.
En el marco de un patrullaje rutinario que se realizaba el 27 de mayo, la tripulación de un buque de la Guardia Costera de Estados Unidos detectó a varias personas en el agua. En ese momento los funcionarios solo pudieron rescatar a ocho sobrevivientes y los cuerpos de dos personas muertas.
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Los supervivientes informaron a las autoridades que la embarcación en la que viajaban había salido del Puerto de Mariel en Cuba, el domingo 23 de mayo y relataron que durante la noche del 26 de mayo la embarcación volcó en el mar. Como consecuencia del suceso todas las personas cayeron al agua y 10 desaparecieron.
La Guardia Costera informó que la búsqueda de los 10 migrantes cubanos se extendió durante más de 123 horas y abarcó aproximadamente 8.800 millas cuadradas, que casi es la dimensión del estado de New Hampshire.
El comandante del Sector de Cayo Hueso de la Guardia Costera de Estados Unidos, capitán de navío Adam Chamie, informó que la decisión de suspender una búsqueda “siempre es difícil” y se asume tras una “cuidadosa consideración de todos los hechos”.
En las labores de búsqueda intervinieron varias embarcaciones y aparatos aéreos, incluidos cuatro aviones y tres helicópteros.
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