Los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos extendieron una medida sanitaria que permite deportar de forma exprés a los migrantes indocumentados que cruzan la frontera de forma irregular en atención a la emergencia sanitaria derivada por la pandemia de COVID-19.
La política de salud pública conocida como Título 42, establecida por la Administración Trump en marzo de 2020 cuando comenzó la pandemia, autoriza que los funcionarios fronterizos expulsen de forma inmediata a los migrantes que ingresan de forma ilegal a través de Canadá y México a territorio estadounidense.
Los menores migrantes que crucen la frontera sin compañía de un adulto están exentos de dicha política.
Los CDC a través de un comunicado informaron que “independientemente de su país de origen, la migración a través de Canadá y México hacia Estados Unidos crea un grave peligro de introducción de la COVID-19 en el país”. Refieren que por esta razón “es necesaria una suspensión temporal para proteger la salud pública”.
La ampliación de esta medida dio inicio el lunes 2 de agosto y será vigente hasta que la directora de los CDC, Rochelle Paula Walensky, determine que el peligro de una mayor entrada del coronavirus a Estados Unidos por parte de extranjeros indocumentados haya dejado de ser un peligro grave para la salud pública de este país, india el texto del comunicado.
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Por su parte la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras (CBP) ha informado que las personas que sean detenidas no serán retenidas en áreas congregadas para su procesamiento y serán expulsadas inmediatamente a su país de último tránsito.
Procesar a una familia bajo el Título 42 “generalmente toma de 10 a 15 minutos y se realiza principalmente al aire libre”, dijo David Shahoulian, subsecretario de política fronteriza e inmigratoria del Departamento de Seguridad Nacional (DHS), citado por la cadena CNN.
El anuncio de la ampliación de la medida ocurre justo cuando la Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU), el Proyecto de Derechos Civiles de Texas, el Centro para Estudios de Género y Refugiados y otras organizaciones, presentaron una demanda contra el Gobierno del presidente Joe Biden para que deje de aplicar el Título 42.
De octubre de 2020 a junio de este año la Oficina de Aduanas y Protección de Fronteras reportó un total de 751.844 expulsiones en la frontera sur bajo el Título 42. En junio de 2021 la agencia reportó que 103.014 extranjeros que ingresaron por la frontera sur fueron regresados a México debido a esta norma.