La empresa biotecnológica china Sinogene logró clonar a un gato por primera vez en ese país, un avance científico que podría llevar a duplicar a otros animales como los pandas.
El vicepresidente de la compañía, Wang Jidong, dijo que darle una segunda vida a un animal doméstico ya es una realidad y en el caso del gatito Ajo (Dasuan, en chino), el costo fue de 250.000 yuanes (unos 34.885 dólares).
Jidong indicó que el dueño del “prototipo” de Ajo decidió solicitar los servicios de Sinogene después de que su mascota muriera de una enfermedad repentina. El especialista aseguró que los ADN de los dos gatos son completamente idénticos, aunque el carácter de Ajo puede ser diferente pues esta característica no depende completamente del ADN, sino que se ve influenciada por las condiciones de vida y el entorno.
El proceso de clonación de un gato lleva entre tres y cuatro meses y tras su nacimiento, el animal permanece otros dos meses bajo observación de los especialistas en un laboratorio especial.
#Cat lovers who are devastated by the death of their beloved felines may soon be able to have their pets cloned, following the birth of China's first cloned kitten. https://t.co/NKlydpMJXT pic.twitter.com/pXTCAXx8mj
— China News 中国新闻网 (@Echinanews) August 21, 2019
Siete meses después de la muerte de su gato, Huang Yu, tuvo la alegría de volver a ver en forma de un gatito gris y blanco a su antigua mascota.
“Se parece en más de un 90%”, aseguró el joven chino de 23 años, que espera que el gato, nacido en el 21 de julio de una gata portadora, tendrá la misma personalidad que el original.
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Ajo es el primer gato clonado por Sinogene, una empresa que desde 2017 ha clonado a unos 40 perros.
Los propietarios de animales de compañía, con frecuencia muy afectados por la muerte de su mascota, están dispuestos a pagar los 250.000 yuanes (35.000 dólares) que cuesta clonar un gato o los 380.000 (53.000 dólares) por un perro.
En las últimas décadas los chinos se han aficionado a los animales de compañía, que estaban prohibidos durante la época de Mao.
La clonación de un gato podría permitir avanzar en el camino hacia la clonación de un panda, un logro que China lleva 20 años intentando.