Al ritmo que vamos, en Florida podría acontecer un Miami´s New Yorker Day Parade. Los datos de migración interna de una década apuntan a que casi el 20% de los residentes del Estado Excelsior se mudaron al estado “In God we trust”. El símil es para abordar la tristeza que hay en Filadelfia. Es la segunda ciudad que aloja a los nacidos en el caribe estadounidense que tiene tilde en Puerto Rico. Este año nuevamente se quedaron sin disfrutar la Parada Puertorriqueña.
La periodista Beatrice Forman de Billy Penn abordó a los entristecidos boricuas. Tomó de ellos testimonios sobre la valoración del evento que nuevamente fue suspendido debido a la COVID-19. La Ciudad y los líderes puertorriqueños no estaban a gusto. Por experiencia saben que el desfile dura tres horas, pero las fiestas en los vecindarios a veces es hasta amanecer. Abrir la puerta al desfile podría agitar una marea de contagios por coronavirus. De allí la suspensión.
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No es una situación fácil. Aunque los puertorriqueños son estadounidenses según el tratado de Paris, su historia es hispana. Datos recientes del censo muestran que la población latina de la ciudad se disparó un 27% en la última década. Y aunque se perciba como un criterio erróneo, casi tres cuartas partes son de ascendencia puertorriqueña.
El caribe estadounidense
Ser puertorriqueño, nacido en la isla o ascendente familiar no cambia nada. Son nacidos en el caribe estadounidense. Son parte de un estado asociado que se rige por la carta magna de las barras y las estrella. Pero surgen lo bemoles…

“Los puertorriqueños siempre están mostrando sus banderas. Haciendo saber a la gente que son puertorriqueños”, dijo Pabon, el estudiante de último año de Temple. Él fue entrevistado por Billy Penn. “Así que es para tener a otras personas como nosotros cerca, y tener un día para simplemente celebrar ser nosotros”.
Especialmente en la segunda mitad del siglo XX, las personas de ascendencia puertorriqueña desempeñaron un gran papel en el desarrollo de Filadelfia. Crearon redes de ayuda mutua. Convirtieron la avenida Lehigh en un corredor comercial. Además ayudaron a impulsar la industrialización general.
Los residentes dijeron que eventos como el desfile permiten a los boricuas celebrar su experiencia compartida. Educar al resto de la ciudad sobre la cultura.
“El desfile es informativo. Es más fácil ser testigo de nuestra cultura de primera mano que leer sobre ella”, dijo Roberto Ríos. Él es un organizador del sindicato de trabajadores de la construcción Consejo de Distrito nº 21. Dijo que ha estado yendo al desfile desde que era un niño. “Me gusta el efecto dominó que se produce allí. La gente mayor aparece y transmite nuestra historia a la generación más joven para que puedan transmitirla a sus hijos”.
La fiesta no se detuvo
El caribe estadounidense en Filadelfia es un motor. Los puertorriqueños encontraron las maneras y crearon sus celebraciones. La fiesta del bloque del Festival El Coqui trajo actuaciones de la banda de merengue Grupo Manía. Estuvo junto a la banda de la casa TKA en la Avenida Lehigh. Por otro lado Snipes y Mural Arts patrocinaron la 4ª recaudación de fondos anual Giveback Puerto Rico en Sunflower Philly. Hubo música de salsa y talleres de pintura.
Alrededor de 5.000 personas acudieron al Spruce Street Harbor Park para el Stroll the Harbor de Concilio. Según las proyecciones de Concilio, estuvo por debajo de las 15.000 personas por día en 2019. Pero aproximadamente el mismo número que suele asistir al desfile de Parkway en persona.
En comparación con la habitual Fiesta Hispana en Penn’s Landing, el nuevo evento es más pequeño. Con un énfasis en el alcance de la comunidad. Junto con juegos y regalos, contó con dos docenas de socios del vecindario. Participaron organizaciones sin fines de lucro. Hicieron entrega de materiales sobre ferias de empleo, asistencia de inmigración y apoyo educativo.
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“Es importante para nosotros estar presentes y ayudar a nuestras comunidades”, dijo Lamya Broussard. Ella es vicepresidenta de operaciones de Caribbean Community in Philadelphia. Una organización sin ánimo de lucro que conecta a la diáspora caribeña de la ciudad con los servicios sociales.