La ciudad de Miami iniciará un nuevo capítulo político con la llegada de Eileen Higgins a la Alcaldía, tras su victoria en la segunda vuelta electoral realizada el 9 de diciembre. Con casi el 60% de los votos según resultados preliminares, Higgins se convierte en la primera mujer, la primera demócrata y la primera no hispana en asumir este cargo en décadas, rompiendo una hegemonía republicana que se extendió por casi 30 años en un puesto oficialmente no partidista.
Higgins, de 61 años y originaria de Nuevo México, llega al puesto tras una campaña que se convirtió en un termómetro del pulso político nacional entre demócratas y republicanos. En la primera vuelta, realizada el 4 de noviembre, lideró con el 35% de los votos, por encima del 19% obtenido por Emilio T. González, su principal rival y exfuncionario de gobiernos republicanos respaldado por el presidente Donald Trump. En una ciudad donde siete de cada diez habitantes se identifican como hispanos o latinos, Higgins desplegó una campaña centrada en el trabajo comunitario, la cercanía y la gestión técnica de los problemas urbanos.
Su trayectoria combina sectores públicos y privados. Ingeniera mecánica egresada de la Universidad de Nuevo México y con un MBA de la Universidad de Cornell, Higgins ocupó cargos en el Departamento de Estado de Estados Unidos entre 2009 y 2012, durante la Administración de Barack Obama. Desde allí trabajó en temas de energía, medio ambiente, cambio climático y oportunidades comerciales, primero en la Embajada de Estados Unidos en México y posteriormente como oficial de Economía y Energía para Sudáfrica y Namibia.
En el ámbito local, Higgins ganó su primer cargo público en 2018 al ser electa comisionada del Condado de Miami-Dade por el Distrito 5. Su victoria sorprendió al establishment político, pues hasta entonces era una activista comunitaria poco conocida. Aprovechando su fluidez en español —que la llevó incluso a usar el apodo “La Gringa” en campaña—, logró conectar con votantes en un distrito diverso y políticamente competitivo. Como comisionada, impulsó proyectos orientados a transformar terrenos subutilizados, agilizar permisos y expandir la construcción de vivienda asequible. También respaldó políticas de movilidad sostenible, incluyendo corredores peatonales, monorrieles y sistemas de autobuses de carril confinado (BRT).
Prioridades del nuevo gobierno
Su llegada a la Alcaldía está acompañada de un paquete claro de prioridades. Según su plataforma de campaña, su objetivo central será “restaurar la confianza” en el gobierno de la ciudad, combatiendo la corrupción y enfocándose en resultados tangibles en vivienda, tránsito y resiliencia climática. En materia de vivienda, un tema especialmente crítico para los residentes, promete agilizar la entrega de permisos y fortalecer los apoyos económicos para desarrollar proyectos asequibles. En movilidad, plantea ampliar rutas y hacer más eficientes los sistemas existentes, mientras que en seguridad busca garantizar que la policía y los equipos de primeros respondientes cuenten con los recursos necesarios.
“Prometo trabajar para ti y hacerlo con integridad, sin gritar y sin drama, únicamente con soluciones a problemas cada día”, dijo Higgins en una entrevista. Su elección, respaldada por sindicatos y figuras demócratas como la alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, y el exsecretario de Transporte Pete Buttigieg, representa un cambio histórico para Miami y abre una nueva etapa política cuyo éxito estará marcado por su capacidad para responder a las demandas urgentes de una ciudad en rápido crecimiento y constante transformación.

































Noticias Newswire









