Joe Torsella, tesorero de Pensilvania, lidera las llamadas a la compañía farmacéutica Gilead Sciences para bajar el precio del remdesivir. Su inquietud ha estado activa desde antes de que el presidente Donald Trump recibiera el tratamiento tras su infección con la COVID-19. El costo del fármaco es demasiado alto para los presupuestos estadales y para las personas.
Torsella en un trino lanzado desde su cuenta en Twiter puso el sistema de costos del remdesivir en perspectiva. Como antecedente se sabe que un paciente típico afectado por la COVID-19 usará seis viales para su tratamiento. El demócrata señaló el pasado 5 de agosto en la red del “pajarito azul” que el remdesivir cuesta entre 2.300 y 3.100 dólares para un paciente de COVID-19.
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En el mismo tuit reflejó que el costo puede verse al detal entre 390 y 520 dólares por dosis. Sin embargo, lo que realmente sorprendió fue que reveló que “producir un solo vial del medicamento cuesta menos de un dólar”.
El tuit pronto se volvió viral. Los datos de Torsella incorporaron a otros 10 tesoreros estatales. Todos piden a la compañía farmacéutica Gilead Sciences que bajara el precio del medicamento. De acuerdo a una historia publicada en WHYY, escrita por An-Li Herring originalmente para WESA, una carta surgió.
En una misiva del 16 de septiembre al fabricante del fármaco, los tesoreros escribieron. “Les animamos encarecidamente a que no se aprovechen económicamente de estas circunstancias extraordinarias… sino que estén a la altura de las circunstancias, en un espíritu de sacrificio compartido, y bajen voluntaria y significativamente el precio de remdesivir inmediatamente”.
Bajar el precio del remdesivir
La farmacéutica Gilead Sciences se puso en contacto con los tesoreros para dar explicaciones sobre la estructura de costos. Sin embargo no ha sido posible bajar el precio del remdisivir. A estas alturas el tesorero de Pensilvania está a la espera de que un “efecto emocional” los ayude. Él reza apara que el uso de la droga antiviral en el tratamiento de Trump haga que más gente se una a la causa de los tesoreros.
“Espero que todos se den cuenta de que si su ser querido contrae COVID-19, les gustaría que fueran tratados de la misma manera agresiva con todas las herramientas posibles que existen”, dijo. “Lo que no quieren hacer en un momento como ese es tener que pasar por el cálculo de si realmente pueden permitirse el tratamiento”.
Las matemáticas de Gilead Sciences
Daniel O’Day, presidente y director ejecutivo de Gilead, reconoció “la importante responsabilidad que conlleva el precio del remdesivir”. El anuncio del precio del remdesivir se produjo a finales de junio. La compañía tenía “que asegurar que el precio no fuera un obstáculo para garantizar un tratamiento rápido y amplio”. También tenía que cobrar lo suficiente para financiar la investigación e inversiones a largo plazo, escribió O’Day en una declaración.
Gilead Sciences con el tema de los costos también echó mano a la psicología inversa que se usa en mercadeo. La compañía señaló que remdesivir prometía ahorrar alrededor de $12.000 en los costos promedio de hospitalización por paciente.
Según una investigación los tratados con remdesivir suelen ser dados de alta cuatro días antes que los que recibieron un placebo. Sin embargo no se ha descubierto que el tratamiento reduzca el riesgo de muerte por COVID-19. Los que evitan un viaje a la UCI podrían ahorrar hasta 40.000 dólares. Torsella respondió que tales ahorros no son el punto de referencia adecuado en medio de una pandemia.
Ética y pandemia
Datos ofrecidos por el Tesorero de Pensilvania ofrecen una estructura reflexiva interesante de considerar. “¿Qué tal si usamos el libro de jugadas que la mayoría de los americanos están usando, estamos en una crisis nacional y la gente de buena voluntad y las compañías de buena voluntad están dando un paso adelante y diciendo que podemos permitirnos sacrificarnos un poco?” dijo el tesorero. “Nadie le está pidiendo a Gilead que pierda dinero con la droga o que ni siquiera gane dinero. Estamos pidiendo que tenga un precio más razonable”.
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A los precios actuales, se espera que Gilead gane 9.000 millones de dólares con el remdesivir durante la pandemia. Un análisis sugiere que la compañía podría reducir el precio a 390 dólares. Es un octavo de la tasa actual. Aun así pueden obtener cientos de millones en ganancias.
El grupo de la epístola
Torsella señaló que remdesivir, originalmente pensado como un tratamiento para el Ébola. Fue desarrollado con 70 millones de dólares en fondos de los contribuyentes. Bajar el precio del remdesivir es una meta. Y aunque Gilead donó 120.000 tratamientos hasta finales de junio, los tesoreros dijeron en su carta que “las donaciones no pueden considerarse un sustituto suficiente para un precio razonable”.
Los tesoreros señalaron que muchos de sus estados, incluyendo Pensilvania, invierten en la compañía. Y dijeron que consideran que es su deber fiduciario, y su responsabilidad con los contribuyentes, intervenir en el tema de los precios. El grupo está formado en su mayoría por demócratas, pero dos republicanos, Robert Sprague de Ohio y Glenn Hegar de Texas, también firmaron.