El edificio Champlain Towers South desapareció y ahora es un indeleble y doloroso recuerdo. En el lugar donde estaba la estructura de 12 pisos levantada hace cuatro décadas en el número 8855 de la avenida Collins de Surfside en Miami-Dade, solo quedan escombros y mucha tristeza por los fallecidos y desaparecidos en el colapso parcial al que siguió una demolición controlada realizada el pasado 4 de julio.
A las 10:30 de la noche de aquel domingo varias detonaciones hicieron caer la parte del edificio que había quedado en pie luego que el ala noreste del condominio se desplomara de forma súbita la madrugada del 24 de junio mientras la mayoría de sus residentes dormían.
En unos segundos una enorme nube de polvo lo cubrió todo tras el estallido que hizo desaparecer lo que quedaba del Champlain Towers South que permanecía como un testigo silente de los briosos esfuerzos por rescatar a las víctimas de entre los escombros.
Desde que ocurrió la tragedia y durante los días sucesivos la imagen del edificio fragmentado en contraste con la aparente normalidad del la parte de la estructura que quedó en pie, con aparatos de aire acondicionado colgando en el vacío y unas literas blancas que ocupaban el reducido espacio que quedó de un cuarto infantil, abrió los noticieros de todo el mundo.

Hoy Champlain Towers South es un espacio lleno de escombros al que regresaron los socorristas para continuar con la ardua labor de encontrar a más de un centenar de desaparecidos en la tragedia que contabiliza más de una treintena de víctimas mortales según informes oficiales.
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El pronóstico de la llegada de la tormenta tropical Elsa al sur de la Florida forzó a las autoridades del condado de Miami-Dade a tomar la decisión de demoler lo que quedaba de la inestable estructura de 12 plantas para evitar que los fuertes vientos y la lluvia la derrumbaran de manera no controlada y causara más daño.
Demolición y fuegos artificiales
Para llevar a cabo la voladura del edificio se fijó la noche del domingo 4 de julio, una fecha en la que los estadounidenses acostumbran celebrar el Día de la Independencia gran cantidad de fuegos artificiales.
Las detonaciones sordas que precedieron a la caída del edificio se confundieron con la colorida pirotecnia.
Un nutrido grupo de curiosos se concentró en las inmediaciones del edificio para observar y documentar la demolición con las cámaras de sus teléfonos, pero la policía los obligó a abandonar el área.
Las calles de Surfside una pequeña ciudad costera de unos cuatro mil habitantes, se encontraban desiertas pues sus vecinos estaban en un refugio habilitado con ese fin o decidieron quedarse dentro de sus viviendas con las puertas y ventanas cerradas y con los aparatos de aire acondicionado apagados.
Casi 200 personas que residían en el Champlain Towers South fueron localizadas con vida tras el derrumbe del 24 de junio, pero perdieron todo lo que tenían en sus hogares.
Los objetos de valor encontrados entre los escombros por los socorristas permanecen ahora guardados por la policía y se entregarán a sus dueños o a sus familiares de acuerdo a lo dicho por la alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava.