A principios de noviembre, la empresa de criptomonedas FTX colapsó dramáticamente, y eso continúa afectando al resto de la industria, especialmente a la plataforma BlockFi.
BlockFi, se declaró en bancarrota en Nueva Jersey. La compañía ya había detenido la mayor parte de la actividad en su plataforma, debido a la situación con FTX.
BlockFi dijo que está buscando protección judicial para reestructurar, liquidar sus deudas y recuperar dinero para los inversores.
La empresa llegó a estar valorada en 3.000 millones de dólares, fue fundada en 2017 por Zac Prince y Flori Marquez y su objetivo era prestar dinero a clientes usando sus activos en criptomonedas como garantía.
En un comunicado, la empresa asegura que «se ha acogido voluntariamente al capítulo 11 del código de bancarrota de Estados Unidos con el objetivo de lograr una restructuración».
FTX y Alameda Research, la compañía con sede en Jersey City, Nueva Jersey, frenó anteriormente los retiros, impuso restricciones y dijo que estaba explorando «todas las opciones» con asesores externos. El llamado «rey de las criptomonedas» Sam Bankman-Fried, quien era fundador y consejero delegado de FTX, renunció y la firma se declaró en bancarrota, de hecho, Bankman-Fried está acusado de haber desviado fondos de la empresa para comprar propiedades en Bahamas.
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BlockFi había atravesado una tormenta en el primer semestre tras la caída generalizada de valor de las criptomonedas.
Entonces, algunos clientes que depositaron en BlockFi bajo la promesa de intereses altos, se asustaron y retiraron sus fondos. La plataforma también se vio afectada por la liquidación de la firma de inversiones Three Arrows Capital, de Singapur, a la cual había prestado dinero. Para ayudarla, FTX le propuso una línea de crédito de 400 millones de dólares, pero al esta declararse en quiebra, no funcionó.
En un mensaje en su página web, aseguraron haber explorado «todas las opciones estratégicas y alternativas» posibles.
En el expediente judicial, BlockFi, con sede también en Nueva Jersey, dijo que le debe dinero a más de 100.000 acreedores. La compañía también anunció el comienzo de un plan para «reducir considerablemente los gastos, incluido los costos laborales», aunque no ofreció más detalles al respecto.
Pero, BlockFi no es la única empresa afectada después de que los precios de las criptomonedas se desplomaran a principios de este año.
El valor de la moneda digital más conocida, bitcoin, cayó desde más de $64.000 hace un año a menos de $20.000 en junio. Celsius Network y Voyager Digital se encuentran entre las otras empresas que también se declararon en bancarrota.